La guerra por la propiedad intelectual de los Leopard 2 se cancela a las puertas del juzgado tras una confesión
La situación se reconduce tras una "aclaración" por parte de Rheinmetall a pocos días de la celebración del juicio.
Además de ser una de los principales aliados de Ucrania en la guerra contra Rusia, los Leopard 2 también han sido protagonistas fuera del campo de batalla. Las declaraciones de Armin Papperger, director ejecutivo de la alemana Rheinmetall, una de las empresas punteras en desarrollo de sistemas militares terrestres, desataron la furia de una de sus principales competencias, la también alemana KMW.
El alto cargo de Rheinmetall afirmó que su empresa contaba con la exclusividad de la propiedad intelectual de los carros de combate Leopard 2A4, unas palabras que sentaron muy mal en KMW, que no toleró estas afirmaciones y se citó con Rheinmetall en los tribunales.
La próxima semana se iba a celebrar el pleito que enfrentaría a ambas compañías, pero finalmente no tendrá lugar ya que Papperger se retractó de sus declaraciones in extremis, aunque desde la empresa lo han catalogado de "aclaración".
KMW y Rheinmetall comparten proyectos
Las declaraciones realizadas el pasado mes de marzo por Papperger señalaban que su empresa poseía la propiedad en exclusividad de los Leopard 2 para 'justificar' el desarrollo de su nuevo carro de combate, el KF51, muy similar al Leopard -ya que la idea es que sea su sutituto- presentado en la feria internacional Eurosatory el pasado mes de junio.
Por este motivo, las palabras de Papperger no fueron nada bien acogidas en KMW, hasta el punto de poner en stand by muchos de los intereses comerciales que ambas empresas comparten, al mantener diversos proyectos conjuntos en el desarrollo de diversos carros, como el Puma o el 8X8 Boxer.
Finalmente, con la "aclaración" de Rheinmetall, estos negocios no se verán comprometidos, por lo que la relación entre ambas empresas vuelve a estar marcada por la paz, que siempre ha imperado.