Un general polaco 'chiva' a Rusia el plan de Ucrania
Se abre un nuevo horizonte tras la conquista rusa de Bajmut.
Waldemar Skrzypczak, general polaco y excomandante de las Fuerzas Terrestres, cree que la conquista por parte de Rusia de la ciudad ucraniana de Bajmut no significaría “nada” en cuanto al desarrollo de la guerra.
Tal y como recoge La Razón, el experto ha señalado que tras la toma de Bajmut, la fuerzas rusa se encontrarán con una gran resistencia defensiva ucraniana en la ciudad de Kramatorsk, un lugar que se encuentra a aproximadamente 30 kilómetros de Bajmut.
De hecho, Skrzypczak ha llegado a deslizar que “los rusos están cayendo en una trampa que les han tendido los ucranianos. Una trampa que permitirá a los ucranianos realizar un ataque lateral”.
Por otro lado, el general polaco indica que para hacerse con todo el Donbás, Rusia tendría que acometer un gran despliegue para hacerse con Sloviansk y Kramatrosk. Sin embargo, opina que “los ucranianos tienen posiciones defensivas con las que romperán el ataque del ejército ruso. La pregunta es: ¿quién dará el siguiente paso? En mi opinión, el próximo paso será el ucraniano”.
En ese sentido, Waldemar Skrzypczak opina que esa ofensiva ucraniana llegaría por los flancos, “y tal vez logren doblegar a las tropas que están en Bajmut”. El experto resalta que “creo que esta debería ser la intención de los comandantes ucranianos. Porque ¿por qué seguir desperdiciando buenas unidades en la lucha por las ruinas?”, ha apuntado en referencia a Bajmut.
Rusia inicia el proceso de desminado de Bajmut
En cuanto a Bajmut, la gran novedad en las últimas horas ha sido que el gobernador prorruso de la República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, ha anunciado que ha comenzado el proceso de desminado de la ciudad de Bajmut tras anunciar el fin de semana que la localidad ha sido finalmente tomada por las fuerzas rusas. No obstante, Ucrania asegura que aún mantiene una “pequeña” presencia en la ciudad.
Pushilin ha subrayado que “es importante llevar a cabo un desminado completo y exhaustivo” de la zona, aunque ha reconocido que se trata de un trabajo “difícil” que entraña riesgos dada la “escalada de las hostilidades que ha tenido lugar en las inmediaciones” de la ciudad.