Fracaso absoluto del "arma milagrosa" de Rusia

Fracaso absoluto del "arma milagrosa" de Rusia

Unas imágenes de satélite lo dejan claro.

El presidente ruso, Vladímir Putin, en una imagen de archivoGetty Images

Malas noticias para Rusia. Unas imágenes de satélite captadas por Maxar este sábado 21 de septiembre apuntan a que el nuevo misil intercontinental ruso RS-28 Sarmat ha explotado en el silo de lanzamiento del cosmódromo de Plesetsk.

El misil fue presentado por el presidente ruso, Vladímir Putin, en el año 2018 como un “arma milagrosa” a través de la que el país demostraría al mundo sus capacidades tecnológicas militares superiores.

Sin embargo, la realidad es que el desarrollo del RS-28 Sarmat se ha visto marcado por constantes retrasos y contratiempos en las pruebas que parecen haber tenido la guinda con esta explosión. De hecho, solo se conoce un lanzamiento de prueba exitoso de este misil y tuvo lugar en 2022.

En concreto, en las imágenes de satélite puede apreciarse un cráter de unos 60 metros en el mencionado cosmódromo ruso. La abertura no estaba presente en imágenes similares tomadas por Maxar a comienzos de este mismo mes de septiembre.

El misil balístico intercontinental RS-28 Sarmat está diseñado para lanzar cabezas nucleares contra objetivos situados a miles de kilómetros, es decir, Estados Unidos o Europa. Por ello, en la OTAN se ha rebautizado a este misil intercontinental ruso como Satán II.

“Es posible que el misil cayera muy cerca del silo y explotara”

Pavel Podvig, analista afincado en Ginebra que dirige el proyecto Fuerzas Nucleares Rusas, ha indicado, en declaraciones a Reuters, que “según todos los indicios, fue una prueba fallida. Es un gran agujero en el suelo”.

Por su parte, Timothy Wright, investigador asociado del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS) de Londres, ha explicado a la misma agencia de noticias que “una posible causa es que la primera etapa (propulsora) no se encendiera correctamente o sufriera un fallo mecánico catastrófico, lo que provocó que el misil cayera o aterrizara muy cerca del silo y explotara”.

Desde el Kremlin, su portavoz, Dmitri Peskov, únicamente se ha limitado a señalar que no tiene constancia de que se haya producido ninguna prueba con el misil intercontinental RS-28 Sarmat.