El silencioso amigo de Putin se niega a responder preguntas sobre Rusia

El silencioso amigo de Putin se niega a responder preguntas sobre Rusia

Su ministro de Exteriores evitó varias preguntas sobre su relación con el país liderado por Putin alegando "razones de tiempo". 

Banderas de Serbia y RusiaGetty Images/iStockphoto

Este viernes, el ministro de Relaciones Exteriores de Serbia, Marko Djurić, y su homólogo checo, Jan Lipavský, mantuvieron una reunión, que fue seguida de una rueda de prensa en la que el medio 'Novinky' cuestionó si Serbia cumplirá el Estatuto de Roma, que obliga a los países signatarios a arrestar a las personas que tengan una orden de detención dictada por la Corte Penal Internacional. 

Sin embargo, el ministro serbio se negó a responder a dicha pregunta, al igual que cualquier otra relacionada con Rusia, por "razones de tiempo", algo que, según el medio justificó, es algo común en Serbia. 

"El ministro Djurić ha aceptado su propuesta y estará muy feliz de hacer una entrevista para 'Novinky.cz'" contestó el departamento de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores de Serbia al medio este lunes, tras su petición para realizar la entrevista al ministro. 

Después de eso, el medio envió algunas de las cuestiones principales de las que trataría la entrevista, como la relación de Serbia con la Federación Rusa o la relación de Serbia con Ucrania, algo que al político no le hizo mucha gracia. 

"Seré honesto. Cuando propuso la entrevista, pensamos, dado que formará parte de la delegación de la ministra Lipavský, que se trataría de temas relacionados con las relaciones serbio-checas", contestó el martes al medio, proponiendo otros temas como la cuestión de Kosovo, que Serbia no reconoce como soberano. 

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Finalmente, la entrevista fue cancelada este jueves, ya que el medio se negó a que se escogiesen las preguntas que a ellos les interesasen. Además, el viernes por la mañana, el ministro canceló las preguntas en una rueda de prensa, alegando la falta de tiempo. La última vez que pudo hacer una pregunta un periodista checo a un político serbio ocurrió hace ocho años.