El Grupo Wagner ejecuta una gran conquista a 5.000 kilómetros de Moscú
Tal y como ha comunicado el Ministerio de Exteriores de Malí.
El Ministerio de Exteriores de Malí ha comunicado este martes por la noche que el Ejército ya controla la ciudad de Kidal y la recién desocupada base de la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de Naciones Unidas en Malí (MINUSMA). Ha sucedido tan solo un día después de anunciar "significativos avances" en su ofensiva contra los rebeldes tuareg, que controlan esta importante localidad desde 2012.
"El Gobierno de Transición tiene el inmenso placer de informar a la opinión pública nacional e internacional que las Fuerzas Armadas y de Seguridad de Malí han ocupado los territorios de la MINUSMA en Kidal mediante el control de dicha región y para felicidad de las poblaciones de la localidad, que han sufrido el martirio durante más de una década de ocupación de la zona por terroristas sin ley", ha publicado la cartera ministerial en su cuenta de la red social Facebook.
Asimismo, ha asegurado que esta ofensiva representa "una hazaña operativa" y un "paso decisivo" en medio de un deterioro de la seguridad regional y de la retirada de los 'cascos azules' de la MINUSMA a petición de la junta militar maliense.
Por su parte, el jefe de la junta militar de Burkina Faso, Ibrahim Traoré, ha felicitado a las autoridades malienses por la recuperación de Kidal y ha "rendido homenaje al pueblo hermano" por la "intrepidez" de los combates.
"Mi admiración al presidente de transición de Malí, el coronel Assimi Goita, por su gran visión, su determinación y su compromiso con un Malí libre y soberano. Esta victoria histórica refuerza nuestra convicción de que vale la pena luchar por la liberación de nuestros Estados y de que saldremos victoriosos", ha escrito Traoré en su cuenta de la red social X, antes Twitter.
Estos avances del Ejército maliense en Kidal suponen un importante éxito para la junta militar, en pie desde el golpe de Estado de agosto de 2020 contra el entonces presidente electo, Ibrahim Boubacar Keita. La asonada se vio seguida por otra en 2021, cuando Assimi Goita se convirtió en presidente de transición.
La coalición rebelde tuareg Coordinación de Movimientos del Azawad (CMA) destacó en septiembre que está "en estado de guerra" con la junta militar de Malí tras denunciar una serie de ataques por parte del Ejército y los mercenarios del Grupo Wagner, en un nuevo vaparalo a la estabilidad de los Acuerdos de Paz firmados en 2015 en la capital de Argelia, Argel.
Los combates estallaron tras meses de tensiones en torno a la suspensión del diálogo entre las partes firmantes del acuerdo de paz de 2015, decisión adoptada en diciembre por la CMA, que exigió un proceso de mediación internacional en un lugar neutral ante la falta de voluntad de la junta maliense para cumplir con lo pactado.
Los rebeldes tuareg se han levantado en armas hasta cuatro veces en 50 años para conseguir, en unos casos, mayor autonomía o, en otros, directamente la independencia de Bamako. El último levantamiento tuvo lugar en 2012, si bien fue rápidamente secuestrado por grupos yihadistas que avanzaron hacia el centro del país africano.