Desvelan los miles de millones que Putin se ha dejado en salarios de Wagner
El intento de golpe de los de Prigozhin ha obligado al Kremlin a reconocer lo que era 'vox populi': que el conglomerado estaba operado y financiado por Moscú.
El grupo Wagner se define como una compañía militar privada. Siempre ha hecho gala de esa supuesta independencia. Sus contratos con el Kremlin estaban a la vista, pero su líder, Yevgueni Prigozhin, siempre remarcaba su independencia. Ahora, tras el intento de golpe que dieron sus hombres a finales del pasado junio, ha quedado constatado que no era así: Vladimir Putin, como era vox populi, es quien operaba y financiaba el conglomerado. Su meta: mantener gracias a estos uniformados su influencia en el exterior.
El vínculo directísimo del Kremlin con los milicianos ha quedado al descubierto por el propio presidente ruso, quien ha declarado que su Ministerio de Defensa y el fondo del presupuesto estatal pagaron a Wagner 86.260 millones de rublos (unos 910 millones de euros) entre mayo de 2022 y mayo de 2023 para cubrir los salarios y bonificaciones de Wagner. "Financiamos este grupo por completo", dijo Putin durante una reunión con las tropas, informó inicialmente la agencia de noticias Interfax.
Algunos informes indican que los contratistas individuales pueden recibir hasta 10.000 euros al mes, desvela la analista Molly Dunigan, del tanque de pensamiento RAND Corporation, en una tribuna publicada originalmente en el diario norteamericano Los Angeles Times. Este salario es casi tres veces más de lo que se pagaba de media en la propia Ucrania en los años 2015 a 2019, cuando Wagner ayudaba en la conservación del poder en la ilegalmente anexionada Crimea y en la pelea independentista en Donetsk y Lugansk.
La autora, con 20 años de experiencia estudiando a milicianos, indica que entonces cobraban unos 2.600 euros largos. En el mismo periodo, los desplegados en Siria llegaron a tener un salario promedio de 7.200 euros.
En los primeros años en Ucrania, además del salario, se añadía una compensación por muerte en acción a las familias de los uniformados, de dos a tres millones de rublos (de 29.000 a 43.000 euros). Si el fallecimiento ocurría en suelo sirio, se llegaba a los cinco millones (72.000 euros), según la misma experta. "No es de extrañar que, dadas las tácticas de carne de cañón de Wagner en Ucrania, la compensación familiar no se aplique en los contratos de trabajo desde 2022", ahonda.
Lo que ha tenido que poner Putin en los bolsillos de los miembros de Wagner supera con creces el salario de poco más de 2.300 euros de los soldados regulares rusos, un sueldo elevado desde el pasado marzo dada la dureza de una contienda, la de Ucrania, que se creía rápida. "A los combatientes de Wagner se les paga significativamente más que a sus contrapartes en el ejército ruso, lo que puede explicar la posible falta de voluntad para que sus contratos de Wagner se convirtieran al ejército oficial ruso antes del 1 de julio", como esperaba Moscú.
Es habitual que, cada cierto periodo de tiempo, el grupo Wagner lance campañas de reclutamiento para engordar sus filas de soldados. Según un informe publicado por Logically, una empresa centrada en la desinformación, estos mensajes se publican en sus redes sociales hasta en 16 idiomas diferentes, incluido el español o el vietnamita.
En uno de esos mensajes publicados esta primavera se citaban expresamente los salarios, como un primer gancho, y se especificaba que el salario no llevaba aún añadido "los bonus que se añadirán cuando se consigan ciertos logros", indicaba por ejemplo un mensaje de Twitter. En otra publicación, en español, también utilizaron el mismo lenguaje para convencer a las personas a alistarse, promocionando "seguros de vida", trabajando para "un equipo enfocado en la eficiencia y ganar".
El número de visitas de estas publicaciones en Twitter o Facebook superaron las 120.000 en los últimos meses, según señala el estudio, y fueron numerosas las interacciones de usuarios preguntando más detalladamente por las condiciones requeridas. Ahora la diferencia es que Ucrania ya no es un destino posible y las misiones se limitan a África.
El Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos aseguró, a principios de este año, que alrededor del 80% de las tropas de Wagner en Ucrania han salido de las prisiones, porque además del aliciente del dinero necesitaba un extra. Esto se debe a que los reclutados habituales, de países como la propia Ucrania, Moldavia o Serbia, no han querido sumarse a esta "operación militar especial", como la llama Putin.