Destapan la guerra soterrada de Putin
Rusia ha sufrido un importante golpe a manos de Estados Unidos.
Rusia libra no solo un conflicto armado con Ucrania sino también una guerra soterrada con Occidente: la de la desinformación. Sin embargo, el país presidido por Vladímir Putin ha recibido en las últimas horas un duro revés en este último frente.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha anunciado que ha desactivado dos dominios y 968 cuentas en la red social X (anteriormente conocida como Twitter). Formaban parte de una granja de bots creada por Rusia con Inteligencia Artificial para difundir desinformación en Estados Unidos y en el extranjero.
En concreto, el fiscal general Merrick Garland ha explicado que “con estas acciones, el Departamento de Justicia ha interrumpido una campaña de propaganda respaldada por el Gobierno ruso y habilitada por Inteligencia Artificial para utilizar una granja de bots con el objetivo de difundir desinformación en Estados Unidos y en el extranjero”.
El director del FBI, Christopher Wray, ha ido más allá y ha asegurado que el objetivo ruso era difundir desinformación para así “socavar” a los socios de Estados Unidos en Ucrania e “influir en las narrativas geopolíticas a favor del Gobierno ruso”.
Tal y como recoge Europa Press, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha detallado que un individuo de Rusia que trabajaba como editor en jefe adjunto de la cadena RT, con sede en Moscú, puso en marcha esa granja de bots a principios de 2022.
El desarrollo de esos bots rusos, llevado a cabo a través de la utilización de un software diseñado con Inteligencia Artificial, fue ejecutado por individuos que ocultaron sus identidades y ubicación.
Las fuerzas rusas en Ucrania pierden casi 100 tanques al mes mientras la industria rusa no construye más de 50 nuevos en el mismo tiempo.
Igualmente, a principios de 2023, con la aprobación y el apoyo financiero del Gobierno de Rusia, un agente del Servicio Federal de Seguridad (FSB) ruso creó una organización de Inteligencia compuesta por trabajadores de RT, entre ellos el citado editor en jefe adjunto de RT. Ambos operaban la granja de bots.
“Para registrar las cuentas ficticias en redes sociales, la granja de bots se basó en servidores de correo electrónico privados, que a su vez se basaron en los dos nombres de dominio confiscados por el FBI”, ha precisado el Departamento de Justicia de Estados Unidos en su nota.
