Descubren que la ruta de los móviles robados en España termina en los mercadillos de este rincón de Marruecos

Miles de teléfonos robados en España terminan en los mercadillos de Sidi Slimane, un centro neurálgico del mercado negro de móviles en Marruecos. Barcelona, en particular, se ha convertido en un punto caliente para el robo de dispositivos que, tras ser sustraídos, cruzan el Estrecho hacia Marruecos a través de redes criminales organizadas, como destacan informes recientes y fuentes policiales.

Según un reportaje de El Confidencial, Marruecos, por su cercanía y facilidad de acceso, se ha convertido en el destino prioritario para estos teléfonos. En ciudades como Sidi Slimane, los dispositivos son desbloqueados y reacondicionados para luego venderse en mercadillos locales o, en muchos casos, reexportarse a otros mercados en África y Asia.

El procedimiento es claro: los teléfonos robados en las calles de Barcelona llegan a Marruecos, donde se someten a un “lavado” y desbloqueo que elimina las restricciones para su posterior venta. Los Mossos d’Esquadra señalan la importancia de denunciar estos robos y registrar el IMEI del dispositivo, un identificador único que permite su rastreo. También demandan sanciones más duras y una mayor agilidad en los procesos judiciales.

Para personas como Susana Alegría, entrevistada en el programa Espejo Público, la experiencia resulta frustrante. “Sentí que alguien lo cogía del bolso, pero no pude evitarlo”, explica. Poco después, geolocalizó su dispositivo en una localidad marroquí, aunque ya estaba apagado y fuera de su alcance.

Los mercadillos en Sidi Slimane y otras ciudades marroquíes siguen atrayendo a compradores por sus precios, considerablemente más bajos que en Europa. Es habitual encontrar móviles robados en estos mercados a precios muy accesibles, lo que refuerza el atractivo del mercado negro y mantiene activo este circuito de venta ilícita de dispositivos en la región.