Las claves del plan de la UE para acelerar la producción de munición tras el desgaste de Ucrania
Se prevé invertir mil millones, 500 millones de fondos comunitarios y 500 más que los Estados miembros cofinanciarán. El objetivo: reponer el arsenal cuanto antes.
La Comisión Europea (CE) presenta este miércoles su ley en apoyo de la producción de municiones en Europa, bautizada como ASAP, que prevé acelerar su fabricación y la flexibilidad necesaria para ello y permitir así la reposición a medio y largo plazo de los arsenales mermados por la ayuda a Ucrania.
“Combinará una reglamentación más ágil con procedimientos de autorización más rápidos. Se trata de acelerar y aumentar ahora la producción de munición porque Ucrania la necesita ya”, avanzó la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, desde Praga, donde confirmó que mañana el Colegio de comisarios europeos dará luz verde a la propuesta.
Esta iniciativa corresponde a la tercera vía del plan europeo para donar a Ucrania un millón de rondas de munición en un año, junto a las que contemplan, en paralelo, la entrega de todas las existencias posibles que tengan en su poder los Estados miembros y los pedidos comunes a la industria para que sean rápidamente repuestas.
Von der Leyen afirmó que la CE propondrá usar 500 millones del presupuesto comunitario para cofinanciación al 50 % de proyectos con los Estados miembros, de los que se espera la misma inversión.
"Hemos conservado una base industrial importante y diversificada para la producción de municiones en Europa. Hoy en día no tiene la envergadura necesaria para satisfacer las necesidades de seguridad de Ucrania y de nuestros Estados miembros. Pero tiene potencial para hacerlo. Podemos y debemos revitalizarla para adaptarla a las necesidades de los conflictos de alta intensidad”, comentó por su parte el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton.
Breton ha recorrido las fábricas de municiones en diversos Estados de la UE y asegura que ha podido “ver de cerca la capacidad de producción de Europa”, que no tiene “nada que envidiar” a sus socios.
“Pero cuando se trata de defensa, nuestra industria debe pasar ahora al modo de economía de guerra”, aseguró, y confió en que en 12 meses Europa pueda aumentar su capacidad de producción a un millón de cartuchos al año.
La UE calcula que, incluso cuando la agresión de Rusia a Ucrania haya finalizado, necesitará seguir reponiendo sus existencias durante muchos años.
Por todo ello, la propuesta comunitaria contempla financiar proyectos industriales que permitan aumentar la capacidad de producción a un 40 %, al que se le puede añadir otro 10 % si se acuerda una nueva asociación o se da prioridad a la fabricación en apoyo de Ucrania.
La idea es crear un fondo rápido que proporcione a la industria subvenciones potenciales para compensar el nivel más alto de los tipos de interés que obtienen de los bancos, si están dispuestas a acelerar su producción.
Los 500 millones del presupuesto comunitario que ofrece la CE combinarán el Fondo Europeo de Defensa y de la llamada ley de adquisición común (EDIRPA, por sus siglas en inglés), propuesta por la Comisión en julio pasado.
En todo caso, la propuesta de mañana deja claro que, si los Estados miembros lo desean, pueden utilizar fuentes como los Fondos de Cohesión para cofinanciar proyectos, como puede ser la creación de una fábrica.
Por otra parte, ASAP propone una exención reglamentaria temporal y excepcional -hasta mediados de junio de 2025- que permita conceder más rápidamente permisos o incrementar los turnos de trabajo en las factorías.
En el mismo contexto, se facilita que las empresas puedan acceder a piezas de repuesto en el mercado único.
"Con esta ley completamos la Europa de la Defensa. Tras apoyar la cooperación en investigación y desarrollo (Fondo Europeo de Defensa) y apoyar la contratación conjunta (EDIRPA), proponemos apoyar la base industrial productiva de la defensa”, concluyó Breton.