Alemania cede a las presiones y autoriza el envío de tanques Leopard 2 a Ucrania
El canciller Olaf Scholz atiende la petición ucraniana y de varios socios europeos y avala tanto el uso de sus propias unidades como el de los Leopard de otros países.
Alemania ha cedido a la presión internacional tras días de dudas y declaraciones contradictorias. El Gobierno teutón ha aprobado el envío de tanques Leopard 2 a Ucrania, como venía solicitando el Ejecutivo de Zelenski y varios socios de la UE y la OTAN, con Polonia a la cabeza. Así, el 'ok' alemán tiene doble implicación: acepta enviar unidades propias y autorizará que otros países envíen los Leopards de los que disponen.
Como adelanta el diario Der Spiegel y confirma la agencia EFE, Berlín está dispuesto a autorizar la transferencia de al menos una compañía del modelo Leopard 2A6, sin que se conozcan aún los plazos. Lo que sí se espera para el miércoles es el anuncio oficial del canciller, Olaf Scholz, añade la citada cabecera.
Los acontecimientos se han precipitado en las últimas horas de este miércoles hasta la decisión de Scholz, que la inteligencia americana daba por inminente. Polonia, por la mañana, había confirmado la presentación de su petición formal a Berlín para recibir el aval en el envío de los tanques a Kiev, un visto bueno necesario por ser vehículos de fabricación alemana.
Sin embargo, el acuerdo no ha sido fácil para Scholz, por las implicaciones que podría tener en el devenir de un conflicto en estos momentos enquistado. Rusia ya advirtió de "graves consecuencias" si Alemania u otros miembros occidentales daban el paso a una "escalada" del conflicto, como apuntó el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov.
No era únicamente un recelo internacional, ya que el tripartito que dirige el país —los socialdemócratas del canciller, los liberales y los verdes— también se movía en posturas diferentes en torno al tema de los Leopard.
A pesar de que la cancillería se escudaba en que cualquier envío tenía que ser coordinado con los aliados occidentales, las discrepancias han llegado a provocar bajas en el gabinete. Fue el caso de la ministra de Defensa, Christine Lambrech, que renunció tras evidenciar su recelo a nuevas ayudas militares a Kiev, junto a otros errores de gestión.
EEUU podría hacer lo propio con sus Abrams M1
Con todo, y pese a las recurrentes amenazas rusas, desde Washington se ha abierto otra vía en el apoyo militar a Kiev. Fuentes de la administración Biden, adelantadas por The Wall Street Journal apuntan a que estaría muy cerca el anuncio oficial de que EEUU mandaría sus propios Abrams M1 como parte de un acuerdo con el gigante europeo para que este no vetase la utilización de sus Leopard.
La postura oficial estadounidense podría llegar esta misma semana, añadían estas fuentes anónimas, pero el 'ok' alemán puede acelerarlo todo. De momento, la Casa Blanca intenta ganar tiempo y descarta un anuncio inminente.
Qué dice España
España se mantiene a la espera, bajo la premisa de actuar con "unidad" y en "coordinación" con el resto de aliados, ha expresado Pedro Sánchez esta noche en el Congreso.
En una intervención minutos después de conocer la decisión alemana, y ante las preguntas de la oposición, el presidente ha insistido en que "nosotros siempre hemos defendido que tenemos que ir de la mano todos los países en esta cuestión, vamos a ver exactamente en qué se sustancia esta decisión".
Poco antes, su ministro de Exteriores defendía una posición similar, `pidiendo "cautela" para no dar excesiva información sobre el material a entregar porque "no hace ningún favor, ni al Gobierno de Zelenski ni ante el pueblo ucraniano que muy dignamente está defendiendo su libertad y soberanía y los valores europeos".