Adiós a la amenaza rusa: China revela el Santo Grial de su ejército y pilla al mundo desprevenido
Un avance en misiles hipersónicos demuestra que, para Pekín, no hay peligro en el horizonte.
Es el Santo Grial, la joya de la corona militar si de misiles hablamos. Un arma prácticamente imposible de derribar con los sistemas antiaéreos actuales. China, aparentemente, lo ha encontrado, como lo demuestra la presentación, esta semana, del modelo GDF-600. Un avance multifuncional, un arma hipersónica con la que China quiere conquistar el mundo. Con eso hay pocas amenazas, ni la rusa.
Los misiles mencionados, vistos en el China Airshow 2024, son misiles hipersónicos, que se diferencian de los demás principalmente por su capacidad de alcanzar velocidades superiores en cinco veces a la del sonido (6.174 kilómetros por hora), no sólo en la última fase del vuelo, sino sobre todo mientras se dirigen hacia el objetivo.
Combinado con capacidades de maniobra avanzadas, vuelo de trayectoria plana y funciones de sigilo relacionadas o inteligencia artificial, estos misiles "son difíciles de detectar y aún más difíciles de derribar", expone el medio polaco Chip, especializado en tecnología.
China presentó un nuevo vehículo hipersónico de impulso y planeo llamado GDF-600 en el espectáculo aéreo de Zhuhai y lo describió como una plataforma versátil capaz de lanzar una variedad de cargas útiles.
Desarrollado por la Academia de Investigación Aerodinámica de Guangdong (GARA), el GDF-600 ofrece no sólo capacidades de ataque cinético, sino también capacidades de reconocimiento y guerra electrónica en una amplia área operativa. En otras palabras, no se trata de un misil cualquiera diseñado para destruir directamente un objetivo concreto.
Este vehículo multifunción fue diseñado para transportar una combinación de submuniciones, incluidos misiles hipersónicos, sistemas aéreos no tripulados y drones especiales. Es por eso que el proyecto GDF-600 es un paso significativo en la tecnología hipersónica, porque puede disparar submuniciones transportadas mientras vuela a una velocidad de Mach 7 a una distancia de 200 a 600 kilómetros y una altitud de hasta 40 kilómetros, aumentando directamente su rango operativo.
El peso total del GDF-600 es de 5.000 kilos y la capacidad de carga útil es de 1.200, lo que permite adaptarlo para fines específicos antes de la misión. Aunque no muchas ojivas/drones destructivos caben en 1.200 kilogramos (una docena aproximadamente como máximo), gracias a la capacidad de liberar estas cargas útiles durante el vuelo, el vehículo puede alcanzar muchos objetivos en un área amplia.
Una de las características distintivas del GDF-600 es la capacidad de desplegar selectivamente la carga útil en diferentes puntos de su trayectoria, y esta flexibilidad le permite realizar múltiples ataques, desplegar drones para tareas de reconocimiento o guerra electrónica, lo que lo convierte en una herramienta versátil en escenarios bélicos complejos.
El valor añadido
El concepto GDF-600 recuerda el trabajo en curso en programas militares similares en otros países, ya que el ejército estadounidense está explorando capacidades similares como parte del programa Precision Strike Missile (PrSM). Estamos hablando de un misil de largo alcance para, entre otros, llevar lanzadores HIMARS o MLRS, que en el futuro podrán tener una versión capaz de transportar drones como parte de la carga útil. Sin embargo, PrSM nunca será hipersónico, y esto es lo que hace que el GDF-600 chino se destaque, porque el mero despliegue de cargas útiles mientras se vuela a tales velocidades los expone a enormes cargas físicas y térmicas. Al parecer, los científicos chinos tenían que controlarlo.
La propia presentación del misil GDF-600 pone de relieve la carrera mundial en el desarrollo de la tecnología hipersónica, que lleva años prometiendo revolucionar el rostro de la guerra, ofreciendo opciones de ataque rápidas, precisas y multifuncionales. Aunque el momento exacto del despliegue operativo del GDF-600 sigue sin estar claro, su concepto en sí apunta a un futuro en el que los sistemas hipersónicos no sólo serán misiles potentes, sino también naves nodrizas capaces de atacar múltiples objetivos simultáneamente.