Una primera clase venida a menos
La aerolínea Emirates hará cambios en sus opciones más lujosas por la crisis del petróleo.
¿Quién no ha soñado en alguna ocasión con viajar en la primera clase de Emirates? La aerolínea del Golfo lleva años liderando el ranking de las más lujosas del mundo, con cabinas independientes en las que lo de menos era el menú —caviar y champagne francés incluidos— y que contaban con camas aisladas y duchas con spa, con productos de Voya. Un lujo en el aire... ligado al precio del petróleo.
Pero con la caída del precio del petróleo también están cayendo los pasajeros que pueden hacer frente a la factura de pasaje con estos superlujos solo al alcance de los dueños de los pozos de petróleo que no tienen avión privado y de los ejecutivos de sus multinacionales. En fin, que la crisis también ha llegado a Emirates y su presidente Tim Clark ha anunciado que en los nuevos aviones que les entregarán este otoño —Boeing 777-300ER— en vez de con ocho cabinas de ultralujo, solo contarán con seis.
Además de disminuir el número de cabinas de primera clase, según parece, Emirates se plantea, por primera vez en las últimas décadas, reducir el tamaño de sus asientos en el resto de billetes. De acuerdo con Bloomberg, la decisión se anunció poco después de que Qatar Airways presentase sus nuevas cabinas de primera clase que cuentan con camas dobles que se transforman en salas de reuniones durante el vuelo.
La nueva primera clase de Emirates será presentada formalmente en noviembre. De momento, en los viajes con noche incluida, se mantienen los pijamas —que van con el precio del billete— fabricados con una técnica especial que mantiene la piel hidratada. Algo es algo.