Una joven pide ayuda en redes para localizar a su perra perdida en Barajas por Iberia
Asegura que la aerolínea no se hace responsable de lo ocurrido.
Virginia, una joven de Sevilla, lleva cinco días pidiendo ayuda en redes para localizar a su perra Piny, que se escapó de la bodega de un avión de Iberia mientras ella hacía escala en Barajas (Madrid) y salió corriendo por el aeropuerto. Desde el 26 de julio no se la ha vuelto a ver.
La chica volaba de Buenos Aires a Sevilla cuando su perra huyó, salió de la terminal 4 y cruzó la carretera junto al aeropuerto. Denuncia que Iberia, culpable en primer lugar de que el animal se escapara, se ha desentendido del asunto.
"Están tan tranquilos, como si lo que hubieran perdido fuera una maleta, jamás dieron parte a nada ni nadie y no se están encargando de nada", critica la joven, que pide que se peguen carteles y se difunda.
Piny tiene cinco años y medio, lleva chip y consta como desaparecida. Virginia solicita a los que estén por los municipios de Barajas, Valdebebas, San Sebastián de los Reyes, Alcobendas, Paracuellos del Jarama, Belvis y Cobeña que vigilen por si la ven.
"No se deja coger, ya cuenta con equipo de rescate preparado; si la veis no intentéis cogerla (salvo que lo veáis tan claro como que se acerque ella sola), sólo avisadnos, por favor", pide en la página de Facebook que ha creado para encontrarla.
Virginia ha vivido durante seis años en la capital de Argentina y regresaba a su ciudad con su hijo de dos años y su mascota, Piny, perdida durante el trasbordo en Madrid. Su marido voló al día siguiente a España junto a su otro can, Totón.
"Ha sido una experiencia realmente traumática, porque todo ha sucedido con mi hijo de dos años y medio presente y viendo cómo yo lloraba desconsolada con todo lo que había ocurrido", lamenta.
Según un blog especializado en 20minutos, hay medio millar de animales abandonados en las instalaciones en Madrid de Aena, la mayoría gatos abandonados o perdidos por los pasajeros. La pasada semana Aena prometió 180.000 euros para el control ético de las colonias felinas de los aeropuertos.
La decisión llegó tras la polémica generada por su decisión de no permitir alimentarlos y cuidarlos, condenándolos al hambre y la cría sin control, algo que se tradujo en una petición en Change.org por una gestión ética de las colonias que superó las 110.000 firmas.