Cuatro muertos en un ataque con cuchillo en la Prefectura de Policía de París
Tras el registro de su domicilio, en la periferia este de París, la policía ha detenido a su esposa.
Francia ha vuelto a revivir el horror. A primera hora de la tarde de este jueves un individuo de unos 45 años, nacido en Fort-de-France, las Antillas francesas, que se había convertido al islam hace dieciocho meses, ha asesinado a puñaladas a cuatro agentes en la Prefectura de policía de París. Con su ataque ha golpeado, de nuevo, el corazón histórico de la capital, a doscientos metros de la catedral de Notre-Dame.
La fiscalía del Estado ha iniciado una primera investigación por homicidio voluntario y homicidio cometido contra representantes de la autoridad pública. Sin embargo, a última hora de la tarde se evalúa la posibilidad de trasladar o no trasladar el caso a la fiscalía anti terrorista. Esto se debe a que, según la cadena BFMTV, el asesino se habría convertido al islam hace año y medio. Tras el registro de su domicilio, en Gonesse, en la periferia este de París, la policía ha detenido a su esposa, sospechosa en un grado que todavía no ha trascendido.
El secretario regional del sindicato Alliance Police Nationale, Loïc Travers, ha comunicado a la prensa que el autor del ataque, un trabajador del personal administrativo con más de 20 años de experiencia, ha sido abatido por otro policía con un arma automática. Según ha explicado Travers en declaraciones recogidas por la agencia la agencia Efe, el agresor comenzó el ataque en su propio despacho, tras lo cual salió y continuó la agresión en las dependencias de la Prefectura.
Para perpetrar el ataque, el hombre ha usado un cuchillo de cerámica para burlar los controles de acceso al establecimiento y, por lo tanto, se trata de un ataque con grado de premeditación. La fiscalía ha informado de que ha procedido a detener a la mujer del presunto autor de los hechos.
“La gente corría, gritando”, ha delcarado Emery Siamandi, un intérprete que estaba en el edificio en el momento del ataque. “Oí un disparo. Momentos después vi a la policía gritando, en pánico”, ha agregado.
El agresor era “un empleado modélico, sin historias”, con “más de 20 años de carrera” en la prefectura, ha explicado por su parte el delegado sindical.
El ministro francés del Interior, Christophe Castaner, se ha desplazado hasta el lugar de los hechos para controlar el operativo desplegado, y también ha acudido al lugar el presidente francés, Emmanuel Macron.
“París llora a los suyos esta tarde tras este espantoso ataque. El balance es grave. Varios policías han perdido la vida. En mi nombre y el de los parisinos, mis primeros pensamientos van hacia las familias de las víctimas y sus allegados”, ha destacado en Twitter la alcaldesa parisina, Anne Hidalgo.
En el marco de la investigación abierta para esclarecer lo sucedido, las fuerzas de seguridad francesas han registrad la casa del atacante, según ha anunciado el fiscal de la capital francesa, Rémy Heitz, en rueda de prensa.
La Fiscalía ha abierto una investigación por homicidio y tentativa de homicidio de personas depositarias de la autoridad pública. Las pesquisas han sido encargadas a la Brigada Criminal y según avancen podrían quedar en manos de la Fiscalía Antiterrorista, según Heitz.
Lo sucedido es “de una gravedad excepcional”, ha subrayado el ministro del Interior, que ha expresado su solidaridad con las víctimas y sus allegados y ha asegurado que se han movilizado todos los medios para esclarecer los hechos.
Los atentados de Francia
Desde 2015, Francia ha sido escenario de varios ataques atribuidos a grupos yihadistas, que incluyeron ataques sincronizados y agresiones aisladas con arma blanca. En total, 251 personas han perdido la vida en estos ataques y el país sigue hasta hoy en estado de alerta.
“Ver a un colega atacar a otros colegas, eso es algo increíble para un policía” ha comentado otro responsable sindical, Denis Jacob. A su juicio, el ataque sería una muestra de “ruptura del vínculo entre nosotros” y de “deshumanización de la institución”.
Esta agresión en el centro de París se produce un día después de una manifestación de miles de policías en París para llamar la atención pública sobre el malestar que reina dentro de la institución, el aumento de los suicidios y la reforma del sistema de pensiones.
Malestar en Francia
Según los sindicatos, 26.000 policías han participado en esta manifestación. En Francia hay un total de 150.000 policías. Francia no había vivido una manifestación policial tan unitaria desde 2001.
A diferencia de precedentes movilizaciones, el desencadenante fue el desgaste operacional vinculado al movimiento de los “chalecos amarillos”, que desde hace casi un año denuncia la política social y fiscal del gobierno, a lo que se une una ola de suicidios de miembros de la policía (52 desde enero), un mal endémico en esta institución.
Los policías también están preocupados por los proyectos de reforma de las jubilaciones, ante el temor de perder las ventajas de su sistema de retiro.