Un estudio revela que Trump ha sido el principal impulsor de la desinformación sobre el Covid
La Universidad Cornell ha analizado 38 millones de artículos en inglés y la conclusión es desoladora
Una encuesta publicada esta semana en EEUU desvela que menos de un tercio de los estadounidenses confía mucho o bastante en el gobierno federal, la Casa Blanca o Donald Trump para brindarles información precisa sobre el coronavirus. Y puede que tengan razón... vistos los datos.
Investigadores de la Universidad de Cornell, en Nueva York, han analizado 38 millones de artículos en inglés sobre la pandemia y han descubierto que Trump fue el principal impulsor de la desinformación sobre la Covid-19 en los medios durante la primera mitad del año.
El estudio determina que de los artículos publicados entre el 1 de enero y el 26 de mayo, más de 1,1 millones (un poco menos del 3%) contenían alguna forma de información errónea. Clasificaron estos textos y encontraron algunos lugares comunes de la teoría de la conspiración repetida insistentemente, como ese dato en cuarentena de que la fuente del coronavirus son las personas que comieron sopa de murciélago, o que la pandemia había sido diseñada para coincidir con el juicio político de Donald Trump, el impeachment.
“El presidente de los Estados Unidos fue el principal impulsor de la desinformación en torno a la Covid”, y las menciones del magnate Trump “comprendieron el 37,9% de la conversación general sobre desinformación”, dice el estudio.
Lo que encontraron los expertos sobre todo fue que cuando se trataba de la promesa de “curas milagrosas”, eran las palabras de Trump las que más resonaron. Y calaron, al final, en los lectores. Su promoción de la hidroxicloroquina y las sugerencias de que la luz ultravioleta o la lejía podrían ayudar a lidiar con el mal generaron una gran cantidad de artículos, proporcionando un vector para que se propague la información errónea.
De manera preocupante, los investigadores encontraron que “la mayoría de la información errónea de Covid es transmitida por los medios de comunicación sin cuestionar ni corregir”.
El estudio se publicó ayer pero en las últimas horas se ha propagado como la pólvora, después de que se haya conocido el positivo de Trump y su esposa Melania por coronavirus.