Un "envasado erróneo" produjo el omeprazol responsable del síndrome del hombre lobo en bebés
Lo ha explicado la ministra de Sanidad en funciones, María Luisa Carcedo.
La ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, ha explicado este miércoles que el error que ha dado lugar a que a alrededor de una quincena niños se les haya administrado crecepelo (minoxidil) en vez del protector gástrico omeprazol se produjo en el envasado del producto.
El fallo “parte de un envasado erróneo”, ha dicho a los periodistas Carcedo, que ha aclarado que la empresa encargada del envasado introdujo minoxidil en un envase “rotulado como omeprazol”.
Los primeros casos, ha señalado, se conocieron en junio a través del sistema de farmacovigilancia e inmediatamente se sospechó de algún problema, ya que “el crecimiento de vello por el cuerpo no es un efecto conocido del omeprazol. Y, efectivamente, tras analizarlo se identificó un producto diferente, minoxidil, que tiene otras indicaciones”, ha reconocido la titular en funciones de Sanidad.
Tras esa verificación, se retiraron todos los lotes defectuosos y en estos momentos no hay ninguno a la venta. Además, como medida cautelar, se procedió al cierre de la empresa Farma-Química Sur S.L. de Málaga, responsable del error.
Alrededor de una quincena de niños de Cantabria, Andalucía y la Comunidad Valenciana padecen hipertricosis -una enfermedad que se caracteriza por el crecimiento de vello por todo el cuerpo- debido al citado fallo que hizo que ingirieran minoxidil -un vasodilatador que se suele prescribir para la alopecia- en lugar del omeprazol.
Los dermatólogos aclaran que el vello se caerá al dejar el medicamento
“Tres meses después de tomar el fármaco empezará a caérseles el vello, que es el tiempo medio de caída del pelo, y en otros dos o tres más se le habrá caído todo, y normalmente no queda nada, porque es un vello que está ahí de forma accidental”, ha explicado Cristina Serrano, coordinadora del grupo de tricología de la Asociación Española de Dermatología y Venereología.
En su nota, la entidad incide en que no se puede dar una fecha exacta de cuándo se les va a caer exactamente, pero subraya que a las madres hay que tranquilizarlas y decirles que se les va a caer “sí o sí”.