Trump destituye a su secretario de Estado y lo reemplaza por el actual director de la CIA
El presidente de Estados Unidos ha anunciado el nuevo nombramiento a través de Twitter.
Donald Trump ha hecho por enésima vez de Donald Trump. Es decir: ventilarse un asunto incómodo vía Twitter.
El presidente de Estados Unidos ha anunciado a través de la red social la destitución de su secretario de Estado (equivalente al de ministro de Asuntos Exteriores), Rex Tillerson, con quien mantenía serias discrepancias en política exterior desde el mismo momento de su nombramiento.
"Rex y yo (...) nos llevamos bastante bien, pero discrepamos en cosas", ha asumido Trump poco después ante los periodistas. "El acuerdo con Irán pensé que era terrible, él pensó que estaba bien. Yo quería romperlo o hacer algo, él se sentía un poco diferente. Entonces... realmente no estábamos pensando lo mismo".
En sustitución de Tillerson entra Mike Pompeo, actual director de la CIA. "¡Hará un gran trabajo! Gracias a Rex Tillerson por su servicio. Gina Haspel será la nueva directora de la CIA, la primera mujer en ser elegida para el cargo. ¡Felicidades a todos!", ha escrito Trump en su perfil de la red social Twitter.
Sobre Pompeo, Trump ha expresado su "confianza" en que es la "persona adecuada para el trabajo en este momento fundamental". "Continuará nuestro programa de restaurar el papel de EEUU en el mundo, fortaleciendo nuestras alianzas, confrontando a nuestros adversarios y buscando la desnuclearización de la península de Corea", ha subrayado.
De hecho, desde la Casa Blanca se ha recalcado que el momento de la destitución no ha sido casual y que se enmarca en las trascendentales negociaciones que se van a abrir en las próximas semanas con Corea del Norte y en la aprobación de varios acuerdos comerciales.
Pompeo, egresado de West Point, la prestigiosa academia militar estadounidense, goza de una gran experiencia política adquirida en cuatro períodos en la Cámara de Representantes, donde integró el controvertido Comité de Inteligencia. Ya como director de la CIA, se hizo un lugar en el círculo más próximo a Trump, elogiándolo con frecuencia y entregándole personalmente muchos informes de inteligencia.
Aún está pendiente que el Senado de luz verde al nombramiento de Pompeo, que tendrá lugar previsiblemente en abril, según ha adelantado Bob Corker, presidente del comité de Asuntos Exteriores de esta cámara, quien ha añadido que no cree que haya ningún problema para ratificar su designación.
El mero nombramiento de Tillerson generó polémica desde el primer minuto: deudor de estrechos vínculos con Rusia, Tillerson era jefe del gigante petrolero Exxon Mobil y amigo personal del presidente Vladimir Putin. Ninguno de los dos ocultó estos lazos: el líder ruso le otorgó la medalla de la Orden de la Amistad en 2012.
Ahora con Pompeo todo será diferente. O no. El propio Trump ha señalado que "con Mike Pompeo tenemos una forma de pensar similar. Tiene una tremenda energía, un tremendo intelecto; siempre estamos en la misma onda".
Pero lo mismo dijo de Tillerson hace meses y la cosa ha acabado como ha acabado. De hecho. Tillerson ha dicho que no tenía ni idea de la destitución, que no ha hablado con Trump en todo el día y que desconoce los motivos que han provocado su cese.
Es decir, puro Trump.