Trump aparca su ‘toleracia cero’ para evitar la separación de niños migrantes
La guardia fronteriza deja de remitir temporalmente a la fiscalía con cargos penales a los inmigrantes irregulares con menores.
Como ya le ha pasado más de una vez al presidente de EEUU, Donald Trump, sus objetivos políticos se han dado de bruces con la falta de recursos de la Administración de país. Es justo lo que ha pasado con su política migratoria. El jefe de Aduanas y Protección Fronteriza estadounidense, Kevin McAleenan, ha asegurado que los padres que cruzan de forma ilegal de México a Estados Unidos con sus hijos, no serán juzgados por el momento a pesar de la intención de Trump de continuar con una política de "tolerancia cero" sobre la inmigración ilegal.
McAleenan ha señalado que los agentes fronterizos no entregarán a los inmigrantes a las autoridades criminales hasta que el gobierno de Estados Unidos pueda averiguar cómo procesarles sin separarles de sus hijos, según ha informado el diario The New York Times.
Esto podría marcar una vuelta a la política de "captura y liberación" a la que Trump se ha opuesto ya que el Gobierno no tiene suficiente espacio en los centros de detención existentes, según el diario.
Eso sí, la directriz se mantendrá en vigor mientras el Gobierno encuentra la forma legal y las instalaciones adecuadas para poder procesar al 100% de los adultos por la vía penal sin separarlos de sus hijos. "No estamos cambiando de política, simplemente es que no tenemos suficientes recursos", ha dicho la portavoz de la Casa Blanca, Sarah H. Sanders, en rueda de prensa.
Trump se ha enfrentado este mes a un protesta global por los niños inmigrantes que fueron separados de sus padres después de que su Administración anunciara en abril que detendría y enjuiciaría a todos los que entraran en Estados Unidos de forma ilegal.
El magnate puso este miércoles fin a la política de separación familiar, pero el Gobierno aún tiene que enviar a más de 2.000 niños a sus familias.