Theresa May esperará hasta final de mes para activar el Brexit
La primera ministra británica enfría las expectativas de un divorcio inminente con la UE
Ocurrirá, pero no tan rápido como muchos esperaban. La primera ministra británica, Theresa May, ha anunciado este martes que aplaza la activación de la ruptura con la UE, el Brexit. Lo hace, según ha explicado en una declaración parlamentaria, por una formalidad: la reina Isabel II, jefa del Estado británico, sancionará"en los próximos días" la ley del Brexit, lo que dará entonces al Gobierno potestad para iniciar la negociación con Bruselas.
May ha explicado que, una vez la ley de Salida de la Unión Europea (UE) reciba la sanción real, ella retornará al Parlamento "a final de mes" para comunicar a los diputados su activación del artículo 50 del Tratado de Lisboa.
La Cámara de los Lores dio el lunes el visto bueno definitivo al proyecto de ley del Brexit, lo que permite a la primera ministra, tras la rúbrica real, activar ese artículo, lo que iniciará los dos años de posible negociación con Bruselas para la salida del Reino Unido del bloque.
Los senadores accedieron a respaldar la legislación sin las enmiendas que habían introducido días atrás para proteger los derechos de los comunitarios y otorgar poder al Parlamento para vetar el Brexit, ambas suprimidas previamente por la Cámara de los Comunes (baja).
En su intervención de este martes para informar sobre la última cumbre del Consejo Europeo, May ha confirmado a los diputados que la ley sigue su curso y estará lista para que ella pueda activar el artículo "a finales de mes", como tenía previsto.
La líder conservadora ha subrayado su intención de alcanzar un acuerdo con Bruselas que "funcione para todo el Reino Unido" y aseguró que el país saldrá de la UE "fuerte y con autogobierno, con control sobre las fronteras y las leyes".
Pese a las quejas de las autonomías, en especial de Escocia, de falta de cooperación sobre el Brexit, ha insistido en que trabaja con ellas y está "escuchando sus inquietudes", al tiempo que ha remarcado que "este no es el momento para divisiones", sino que "hay que unir al país".
La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, pidió el lunes un segundo referéndum de independencia para Escocia en 2018 o 2019 ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el Gobierno de Londres sobre los términos de la salida de la UE.
Sturgeon reveló que la semana próxima solicitará autorización al Parlamento de Edimburgo para obtener del Ejecutivo de Londres una orden que permita al Legislativo escocés regular la convocatoria del plebiscito.
La primera ministra aborda las negociaciones con Bruselas con grandes presiones internas de las autonomías y de los sectores económicos para garantizar los derechos de los ciudadanos comunitarios en el Reino Unido y el máximo acceso de este país al mercado europeo.