Sandra Golpe: "No somos el azote de la izquierda"
"Nos critican tanto de Vox como de Unidas Podemos", aclara la presentadora de 'Antena 3 Noticias'.
Sandra Golpe lleva ya 32 meses consecutivos liderando las audiencias de la sobremesa con Antena 3 Noticias. A esto se suma que, de entre todas las ediciones de la televisión, es también la más vista desde hace seis meses. Casi 2,5 millones de personas se informan cada día con la presentadora.
En épocas bajas para Antena 3, la cadena ha podido presumir de tener el espacio de noticias más visto. No lideraba el prime time —ahora ya ha superado ese bache—, pero tenía el prestigio de liderar con la información.
El espacio de Sandra Golpe ha conseguido la fidelidad de su audiencia, aunque le persigue la sombra de ser un informativo de derechas.
“Sabemos que nos ve gente de todo tipo, para alabar o criticar, pero nos siguen”, explica la periodista, que rechaza cualquier etiqueta porque “se cuenta todo para todo el mundo”. “No nos callamos nada”, aclara.
Te llaman ‘la nueva líder de los informativos’ en todos las web de tele.
El piropo debilita. El periodismo es una carrera a largo plazo. Estamos exultantes, pero ésta es una profesión caprichosa. Sé que no siempre estaré en pantalla y que habrá un momento en que no me respalden los buenos datos. Los éxitos son del equipo, pero también los fracasos, ¿eh? (Ríe).
Dicen que lo difícil no es llegar, es mantenerse. ¿Sientes esa presión?
Por supuesto. Mentiría como una bellaca si te dijera que no. Todos los días nos examinamos con el dato del share, tenemos arrastres buenos con La ruleta de la suerte, pero el reto es mantener a esa gente y subir el dato, y ahí sí que podemos sacar pecho. Se ha notado mucho en los meses del confinamiento. Teníamos mucha presión porque había mucha gente viéndonos. La presión está en que cuesta ganar la confianza del espectador y con un solo error la puedes perder.
Lo importante en un presentador de informativos es eso, la credibilidad. ¿Cómo se consigue?
Te la dan los años de experiencia. Los informativos de Antena 3 siempre han estado consolidados. El día a día es el que te hace ser creíble.
A pesar de haber conseguido esa credibilidad, hay una etiqueta que os persigue. ¿Antena 3 Noticias es un informativo de derechas?
Es cierto que podíamos encuadrarla hace tiempo en una televisión que es más vista por espectadores de centroderecha, mientras que laSexta, que está en el mismo grupo, tiene otro público. El gran desafío es acabar con esa etiqueta y demostrar que se puede contar todo para todo el mundo. Ahora sabemos que nos ve gente de todo tipo, para alabar o criticar, pero nos siguen. Una de las claves del éxito es que no nos callamos nada.
La otra etiqueta es que sois el azote de la izquierda.
No estoy para nada de acuerdo. Unidas Podemos nació de la calle pero ahora están gobernando España. Ellos tendrían que ver que es poco común descalificar a un periodista simplemente por informar. Nos critican tanto de Vox como de Unidas Podemos, pero dejamos eso en el plano anecdótico. Ese partido hizo algo que no hicieron los otros, hablaron de un ‘presunto periodista’ que de presunto no tiene nada (Vicente Vallés). También hablamos bien de Unidas Podemos cuando generan buenas noticias que hay que realzar. Yolanda Díaz, por ejemplo, esta consiguiendo muchos pactos con el diálogo, y eso también lo contamos.
La noticia ahora es la pandemia. ¿Se está gestionando bien desde el Gobierno?
Ahí están los datos que genera la pandemia. La gestión se tendría que valorar en función de que esos datos sean mejores o de que empeoren, tanto la del Gobierno como la de las Comunidades Autónomas. No señalamos sólo al Gobierno de coalición. Buena, buena no ha sido la gestión, es de lógica. Ha tenido que venir una segunda ola para que veamos que necesitamos un consenso. Ya es hora de que se pongan de acuerdo, porque tiene muy mala pinta. Me remito al frío dato de cada día. La Sanidad debería ser reforzada, en especial la Atención Primaria. Estaría bien que este Gobierno dedicara el 2% del PIB, que es lo que hacen todos los países de nuestro entorno, a la ciencia para que no se nos vayan nuestros científicos.
¿Qué hace falta para que espabile la clase política y se ponga a trabajar en lugar de dar tanto mitin?
En la Transición hubo un espíritu claro de conciliación, de arrimar el hombro y de no mirar la ideología, y este país está pecando de lo contrario y se está polarizando mucho. Tengo confianza en que dé un giro, porque el otoño e invierno que se avecina… vemos colas de hambre, se van a perder más de medio millón de puestos de trabajo, los hospitales van a colapsar… En la transición había comunistas sentados con falangistas. Todos se sentaron y construyeron un país. Ahora, los políticos y sus guerras provocan desafección en la sociedad, porque si tenemos que ver cada semana los espectáculos que nos regalan nuestras señorías…
Hablando de espectáculos, alguna vez se os ha tachado de sensacionalistas.
Cada día nos damos latigazos al reflexionar. Cuando encargas una realidad aumentada tienes una cosa en la cabeza que le cuentas al jefe de grafismo, que a su vez se lo traslada a otra persona. A las 15:00 horas nos atraca la actualidad. Alguna vez hemos patinado, pero no por voluntad propia. Hace tiempo alcanzamos una cifra redonda con la pandemia y dimos el dato con realidad aumentada, pero luego en directo comprobamos que las cifras parecían un numero premiado de la lotería. Somos humanos, no puedes llegar a todo lo que hace todo el mundo porque somos 300 personas trabajando, pero la voluntad no es el sensacionalismo. Con la primera ola teníamos imágenes muy duras y no las mostramos. Quizás fuimos demasiado prudentes porque a lo mejor habrían servido para concienciar. Hay que mostrar lo que sucede con toda su crudeza, porque sigue habiendo imprudencias.
¿Qué eliminarías de la televisión?
Me gusta hacer zapping y ver todo, igual que me gusta leer todos los periódicos y las revistas del corazón. Puedo ver Telecinco sin problema. No me gustan los prejuicios, igual que no me gusta que prejuzguen Antena 3 Noticias y digan que es de derechas o de fachas. Odio las etiquetas en todas sus maneras. La tele tiene una función de entretenimiento y es necesaria. Creo que ese entretenimiento puede ser un poquito más blanco o más vinculado con el análisis de lo que estamos viviendo, de investigación, sobre todo en estos momentos que hay tanta información y hace falta reposarla.
Hace poco dejaste a mucha gente de piedra al confesar que habías sido víctima de una agresión sexual.
El hecho de contarlo no fue premeditado. Fue en un entorno pequeño de un foro en el que algunas chicas iban a denunciar situaciones. Me pidieron que lo contara y pensé “pero si ocurrió hace 20 años”. Jamás se me habría pasado por la cabeza porque soy muy pudorosa, pero pensé que podría ayudar a alguien a quitarse esa vergüenza que te produce pasar por una situación así, y el estigma cuando realmente tú eres la víctima. Es algo que está a la orden del día, incluso lo de las agresiones en grupo. Pensé que iba a quedar en ese foro, que mis palabras eran menos relevantes.
Y el tema del machismo se tocó. ¿Lo has vivido profesionalmente?
Hay mucho micromachismo. ¿Cuántas veces te ha pasado a ti que vayas con un compañero a un sitio y miren a tu compañero cuando te están explicando algo? ¿O que tú seas la responsable de un trabajo y venga un compañero a explicarte cómo hacerlo? Una mujer era mi jefa en la época en la que sufrí la agresión y, cuando fui con toda la vergüenza del mundo a contárselo, no me apoyó para cambiarme el turno [llegaba a casa a altas horas de la mañana]. Esa actitud de muchas mujeres que fueron jefas en un mundo de hombres y se convirtieron en eso es habitual. Quise poner en valor que eso también es un peligro al que nos enfrentamos las mujeres.
¿La ley protege a la mujer?
Lo que nos tiene que proteger es la buena educación. Tiene que resolverse en las casas y en las aulas desde pequeños. Los jóvenes que tenemos ahora están haciendo cosas que hace 20 años no sucedían. Algo esta fallando en la base de la sociedad. La legislación tiene que ir acorde con los tiempos. Los niños ahora crecen antes, con 12 años acceden a la pornografía.
¿Cuál es la mejor y la peor noticia que has dado?
“La paz en el mundo”, como en Miss Universo (ríe). Espero no haber dado todavía la mejor. La peor… ETA me hizo mucho daño por dentro porque tuvimos que dar muchas muertes, hacer muchos directos de atentados... Me da mucha pena que el 60% de los jóvenes no sepa quién fue Miguel Ángel Blanco. No entiendo por qué no se enseña la Historia reciente de España, algo está fallando en la educación. También tuve que contar la muerte de una familia que era como la mía. Mi mejor amiga, que es como mi hermana, me llamó pidiendo que verificara si su familia había muerto en un accidente de tráfico y, efectivamente las iniciales de ellos estaban en el teletipo.