Putin ordena una "operación militar especial" en el Donbás
El presidente ruso advierte que cualquier interferencia "tendrá consecuencias nefastas para un agresor potencial” y habla de la "desnazificación" de Ucrania. Los combates ya se libran en los alrededores de Kiev.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha ordenado “una operación militar especial” en el Donbás a través de un discurso televisivo. Este anuncio se produce después de que el presidente ruso reconociera la soberanía de las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania, y pidiera al Senado autorización para enviar tropas al extranjero, presuntamente con fines de pacificación. No obstante, el ataque no se ha limitado a esta región y los combates entre las fuerzas rusas y las ucranianas se libran esta mañana a 150 kilómetros de Kiev.
“Las repúblicas populares de Donbás se dirigieron a Rusia con una solicitud de ayuda. En este sentido, decidí llevar a cabo una operación militar especial. Su objetivo es proteger a las personas que han sido objeto de abusos, genocidio por parte del régimen de Kiev durante ocho años”, ha afirmado Putin, de lo que desde el Ministerio de Defensa de Rusia han calificado como una intervención “quirúrgica” dirigida a destruir infraestructuras militares. Sin embargo, ya se han registrado las primeras 40 muertes, comunicadas por las autoridades ucranianas que también aseguran haber contabilizado medio centenar de bajas de soldados rusos.
En este sentido, el presidente ruso ha señalado que desde Rusia se esforzarán “por la desmilitarización y la desnazificación de Ucrania, así como por llevar ante la justicia a quienes cometieron numerosos crímenes sangrientos contra civiles, incluidos ciudadanos de la Federación Rusa”, tal y como recoge la agencia de noticias TASS.
En su justificación, Putin ha asegurado que “no tenía otra opción” que el ataque para defender a Rusia de las amenazas de seguridad. “Debe quedar claro: las cosas que están ocurriendo son una medida forzada”, ha señalado durante una reunión este jueves con empresarios rusos. “Ellos simplemente no nos dejaron otra opción”, ha añadido.
Para Putin, Rusia sigue siendo una de las potencias nucleares más poderosas del planeta, por lo que “ningún potencial agresor debería tener dudas de que será derrotado por completo”.
“En cuanto a la esfera militar, la Rusia moderna, incluso después del colapso de la Unión Soviética y la pérdida de una parte significativa de su potencial nuclear, es hoy una de las potencias nucleares más poderosas”, ha agregado.
Así, Putin ha advertido de que “nadie debería tener duda de que un ataque directo a Rusia conducirá a la derrota y tendrá consecuencias nefastas para un agresor potencial”. En este sentido, Rusia no permitirá que Ucrania tenga armas nucleares, ha indicado.
Los planes de la Federación Rusa no incluyen la ocupación de territorios ucranianos, ha asegurado el mandatario. “Las circunstancias requieren una acción decisiva de Rusia”, ha zanjado Putin.
Sin embargo, durante este jueves, sus militares han tomado la central nuclear de Chernóbil, el escenario del mayor desastre atómico del mundo en 1986. Esto puede suponer un riesgo para el resto de países porque si las instalaciones sufren daños, el material radiactivo puede extenderse.
Zelenski impone la ley marcial y armará a la población
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha impuesto la ley marcial en todo el país tras el anuncio de Putin. “Imponemos la ley marcial en todo el territorio de nuestro Estado”, ha informado en un vídeo en su canal oficial de Telegram. Horas después ha anunciado que rompe relaciones diplomáticas con Rusia y que armará a la población que “desee defender a su país”. Precisamente, bajo la ley marcial se considera que cualquier civil es considerado como un militar.
El Gobierno ucraniano ha asegurado que se defenderá de la invasión a gran escala que Rusia acaba de anunciar y que ganará. “Putin acaba de lanzar una invasión a gran escala de Ucrania. Las pacíficas ciudades ucranianas están bajo ataque. Esta es una guerra de agresión. Ucrania se defenderá y ganará. El mundo puede y debe detener a Putin. El momento de actuar es ahora”, ha escrito el ministro ucraniano de Exteriores, Dmitri Kuleba, en un tuit.
Al término del discurso de Putin varias explosiones han sacudido Ucrania en distintas ciudades, entre las que se encuentran la capital, Kiev. “Rusia ha lanzado ataques contra nuestra infraestructura militar y guardias fronterizos”, ha dicho Zelenski.
Según recoge la agencia de noticias Unian, se ha informado de al menos cuatro explosiones en Kramatorsk, una poderosa explosión en la región de Odesa, así como en Járkov y Berdyansk. Las explosiones también se han escuchado en la capital, Kiev, por los residentes de los barrios de Pozniaky y Troieschyna. Mientras tanto, se han reportado explosiones y tiroteos cerca del aeropuerto de Boryspil.
Solo ha sido el comienzo de una intervención que ha continuado con la entrada de columnas de tanques rusos desde Lugansk y efectivos militares desde la región de Crimea, la misma que Rusia anexionó ilegalmente en 2014. De hecho, Moscú ha asegurado que los soldados de la Guardia Fronteriza de Ucrania abandonaron en masa sus posiciones en la frontera mientras las fuerzas rusas toman terreno en el Donbás. También han señalado que se han inutilizado los aeropuertos ucranianos y las últimas informaciones de las autoridades de dicho país sitúan a los tanques rusos a 150 kilómetros de la capital.
Biden acusa a Putin de un ataque “injustificado” y “premeditado”
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha acusado este miércoles al líder ruso de lanzar un ataque “no provocado e injustificado” contra Ucrania y de apostar por una “guerra premeditada” que provocará pérdidas “catastróficas”.
“Solo Rusia es responsable de la muerte y la destrucción que este ataque traerá y Estados Unidos y sus aliados y socios responderán de una forma unida y decidida. El mundo hará que Rusia rinda cuentas”, ha señalado Biden en un breve comunicado.
Así, ha explicado que seguirá la situación desde la Casa Blanca durante la noche y que el jueves por la mañana se reunirá con sus homólogos del G7 antes de dirigirse a los estadounidenses para “anunciar más consecuencias” contra Rusia por “este innecesario acto de agresión contra Ucrania y la paz y seguridad globales”.
“También nos coordinaremos con nuestros aliados de la OTAN para asegurar una respuesta fuerte y unidad que disuada cualquier agresión contra la Alianza”, ha añadido el presidente estadounidense. A lo largo de esta jornada se espera que Biden comparezca para anunciar las nuevas sanciones contra Rusia.
Reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU
Al mismo tiempo que se emitía en la televisión el discurso de Putin en los canales de televisión estatales, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunía de urgencia ante la escalada del conflicto. En este escenario, Rusia ha justificado su decisión de intervenir en Ucrania por las supuestas “provocaciones” de Kiev y la situación de la población del Donbás y ha repetido que no busca una “ocupación” del país vecino.
El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, ha repetido las palabras anteriores de Putin y ha recalcado que el objetivo de esta “operación especial” es “proteger a las personas que desde hace ocho años llevan sufriendo un genocidio por parte del régimen de Kiev” y “desmilitarizar” Ucrania.
La guerra había comenzado mientras la última oportunidad diplomática se desvanecía. El propio secretario general de la ONU, António Guterres, expresaba más tarde con total desolación: “Sólo tengo una cosa que decir desde el fondo de mi corazón. Presidente Putin, impida que sus tropas ataquen Ucrania. Dé una oportunidad a la paz, demasiada gente ha muerto ya”.
La respuesta de la OTAN y la UE
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha condenado “enérgicamente” este jueves el ataque “no provocado” de Rusia contra Ucrania que, según ha dicho, arriesga “innumerables vidas civiles”. Además, ha lamentado que Moscú haya elegido el “camino de la agresión”.
“Condeno enérgicamente el ataque temerario y no provocado de Rusia contra Ucrania, que pone en peligro innumerables vidas civiles”, ha afirmado Stoltenberg en un comunicado. Mañana, viernes, tendrá lugar una videoconferencia de los líderes de la Alianza Atlántica para coordinar la respuesta conjunta. No obstante, y después de que ocho países invocasen el artículo 4 del Tratado de Washington, Stoltenberg ha confirmado la voluntad de los aliados de dar pasos para fortalecer la defensa del flanco oriental.
Esto quiere decir que se podrá poner sobre el terreno cercano a Ucrania a las Fuerzas de Respuesta Rápida. Precisamente, estos batallones se componen de hasta 40.000 efectivos con capacidad para desplegarse en cualquier escenario en un plazo de cinco días y durante un máximo de 30. Con todo, la organización militar no tiene tropas en Ucrania y “no hay planes” de desplegarlas.
A la condena también se ha unido la Unión Europea, que ha calificado el ataque de “injustificado” y ha expresado su temor por los civiles. Y ha asegurado que hará que el Kremlin “rinda cuentas” por ello. Ya se han anunciado la imposición de “severas sanciones” a Rusia.
“Condenamos enérgicamente el ataque injustificado de Rusia a Ucrania”, indicaron en sendos mensajes en sus cuentas oficiales de Twitter los presidentes de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y del Consejo Europeo, Charles Michel. Posteriormente, han anunciado en una rueda de prensa conjunta que hoy mismo se aprobará en un paquete de ayuda a Ucrania.
Lo han hecho en una rueda de prensa conjunta con el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, en la que han destacado la unidad y fortaleza. Al mismo tiempo, se han expuesto las bases de las sanciones financieras y de limitación tecnológica con la que pretenden ahogar a Rusia en respuesta a la violación del Derecho internacional.
Cierre total del espacio aéreo
La Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) ha informado este jueves de que clasifica a Ucrania como zona de conflicto activo ya que su espacio aéreo e infraestructuras se ven afectados por hostilidades que suponen un riesgo para la seguridad de la aviación civil.
En un comunicado remitido por la organización, con sede en Alemania, la EASA ha indicado a las aerolíneas que Ucrania es ahora zona de conflicto activo y que existe un riesgo “de que los aviones civiles sean blanco deliberado o sean identificados erróneamente”.
“El espacio aéreo de Ucrania y sus infraestructuras más importantes, como los aeropuertos, están sometidos a la influencia de operaciones militares, lo que crea riesgos para la seguridad de la aviación civil,” ha agregado la Agencia. “La presencia y posible uso de una amplia gama de armamento aéreo y terrestre supone un alto riesgo para los vuelos civiles a toda altitud,” ha concluido.
Ucrania ha ordenado el cierre de su espacio aéreo tras el inicio de la operación militar lanzada por Rusia en el país. “Debido al alto riesgo de seguridad de la aviación para la aeronáutica civil se decreta (...) el cierre del espacio aéreo de Ucrania para vuelos civiles”, ha informado en un comunicado la Empresa Estatal de Servicios de Tránsito Aéreo de Ucrania.
Poco antes Rusia cerró el espacio aéreo en su frontera occidental con Ucrania y Bielorrusia, según un aviso emitido por las autoridades de aviación rusas. Esta misma medida ha sido tomada por Moldavia una vez iniciado el ataque por aire y tierra contra territorio ucraniano, fuera y dentro del Donbás.
Es decir, eso a lo que Putin ha llamado “operación militar especial”.
Sánchez advierte que Rusia no quedará impune
Desde la Moncloa, el presidente Pedro Sánchez ha mandado un duro mensaje al Kremlin y le ha advertido que su violación al derecho internacional “no quedará impune”. En ese sentido, ha anunciado que el Consejo Europeo, en sesión extraordinaria, se va a reunir esta jueves por la noche para definir una respuesta común. “Estamos en contacto, desde hace ya unas semanas, con nuestros socios, con nuestros aliados, para dar una respuesta coordinada y de unidad europea ante esta crisis”, ha expresado.
Sobre la posición del Gobierno de España, Sánchez ha asegurado que “ha sido muy clara desde el principio” y que se ha apurado “hasta el extremo” la vía diplomática para evitar la escalada bélica. Además ha recalcado, que junto con el resto de aliados, “no aceptaríamos nunca una agresión injusta, injustificada” y que, por tanto, sancionarían cualquier violación de la legalidad internacional.
En su mensaje, también se ha acordado de los españoles en el país, una comunidad de unos 436 compatriotas inscritos en la embajada española, de los cuales al menos un centenar ya ha salido. “Los servicios consulares están manteniendo un contacto telefónico para proporcionarles la información disponible sobre las posibilidades y las vías para abandonar Ucrania o también de evacuación cuando la situación lo permita”, ha anunciado.
Del mismo modo, la embajada española en Varsovia (Polonia) también está en alerta para prestar “todo el apoyo logístico” que sea necesario.
Las primeras consecuencias económicas
Uno de los primeros efectos del ataque ruso ha sido la subida del precio del gas natural. En concreto, la cotización de los contratos de futuros de gas europeos negociados en la plataforma neerlandesa TTF se han disparado hasta los 141, 80 euros el megavatio hora, lo que supone más del 60% del cierre del miércoles.
También se han visto las primeras subidas en el petróleo. Los futuros del barril de Brent se han afianzado en el entorno de los 103,7 dólares, un 7,11% por encima de la cotización observada el miércoles. El precio del West Texas Intermediate ha alcanzado los 97,37 dólares, un 5,74% más. En ambos casos, las cotizaciones de ambos barriles se encuentran en su mayor nivel desde el verano de 2014.
En España, la bolsa ha caído el 2,86% y vuelve a niveles de hace un año, por debajo de los 8.200 puntos. El IBEX 35, principal indicador del parqué nacional, ha cedido 241,6 puntos arrastrado por los bancos.