Reino Unido alerta de que la cepa británica del coronavirus parece ser más mortífera
Las vacunas que se están administrando en el Reino Unido parecen ser efectivas contra ambas cepas, a juicio de los científicos.
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha anunciado que se dan “evidencias” de que la variante identificada en el Reino Unido del coronavirus “está asociada a un mayor nivel de mortalidad”, además de ser más contagiosa.
Johnson explicó en una rueda de prensa que, debido al impacto de esta nueva variante, el sistema público de salud británico (NHS) está “sometido a una mayor presión”, aunque ha añadido que las vacunas que se están administrando en el Reino Unido parecen ser efectivas contra ambas cepas (la original y la británica) a juicio de los científicos.
“Hemos sido informados hoy de que, además de expandirse más rápidamente, ahora parece también que hay algunas evidencias de que la nueva variante, identificada en Londres y el sureste, podría estar asociada a un mayor nivel de mortalidad”, ha dicho el primer ministro británico.
Más pacientes que la primera hora
Ha afirmado que los 38.562 pacientes por la covid-19 actualmente en hospitales británicos es una cifra un 78% superior al pico registrado en la primera ola, en abril.
El ministerio británico de Sanidad ha anunciado que en las últimas 24 horas se han registrado 1.401 nuevos fallecimientos causados por la enfermedad.
Por su lado, en la misma conferencia de Johnson, el principal asesor científico del Gobierno, Patrick Vallance, ha señalado que la variante británica es entre un 30% y un 70 % más contagiosa que la original, aunque se desconoce todavía por qué.
De igual forma, el científico ha asegurado que hay pruebas de que esta variante entraña un mayor riesgo de muerte que la original, aunque matizó que las “evidencias todavía no son fuertes”. De hecho, esa mayor mortalidad no se ha detectado entre los ingresados en hospitales, pero sí sobre el total de casos positivos detectados.
Vallance ha puesto el ejemplo de la población de hombres de 70 años: con la variante antigua, 10 de cada 1.000 contagiados morirían. Con la cepa británica, esa cifra podría elevarse hasta 13 o 14.
Pese a todo,ha insistido una vez más en que hay “mucha incertidumbre” al respecto, aunque también cada vez más señales de que las vacunas son efectivas con la nueva variante.
Existen más dudas sobre la eficacia de las vacunas existentes con las cepas identificadas en Suráfrica y Brasil, según reconoció Vallance.