Trump: "El 'impeachment' se usará ahora para atacar a los futuros presidentes"
"Ganaremos", ha escrito el presidente de Estados Unidos en su primera reacción al anuncio hecho por Nancy Pelosi.
Ni periodo de reflexión ni nada. Donald Trump ha reaccionado en caliente con inmediatez al anuncio hecho por la presidenta del Congreso de EEUU, Nancy Pelosi, de pedir el comienzo de la redacción del ‘impeachment’ contra él.
En un par de tuits, conducto oficial de sus comunicaciones más personales, el magnate estadounidense ha criticado con cólera (aunque siendo él podía temerse algo peor) a la “izquierda radical que no hace nada” y les ha acusado de banalizar el uso de una herramienta “importante y escasamente utilizada como es el ‘impeachment’”.
“Los demócratas radicales de izquierda que no hacen nada anunciaron que van a tratar de acusarme por NADA. Ya se dieron por vencidos con las ridículas “cosas” de Mueller, así que ahora se apoyan en dos llamadas telefónicas totalmente apropiadas (perfectas) con el Presidente de Ucrania. Esto significará que el acto de destitución más allá de lo importante y raramente utilizado se utilizará habitualmente para atacar a los futuros presidentes. Eso no es lo que nuestros Fundadores tenían en mente. Lo bueno es que los republicanos NUNCA han estado más unidos. ¡Ganaremos!”, ha escrito en su Twitter.
Con estas palabras, Trump ha respondido a Nancy Pelosi, que ha señalado que “nuestra democracia está en juego”. Para la líder de la Cámara de Representantes “el presidente es una amenaza continua para nuestra democracia y no nos deja otra opción que actuar. Les pido a nuestros presidentes que sigan adelante con los artículos del juicio político”. Y en su comunicado ha insistido en que el presidente “abusó de su poder para su propio beneficio político personal a expensas de la seguridad nacional”.
Un proceso abocado al fracaso (o quizás no tanto)
Para tranquilidad de Donald Trump, todo apunta a que el ‘impeachment’ fracasará al llegar al Senado. Antes debería recibir el voto favorable del Comité Judicial de la Cámara de Representantes y de la propia Cámara, ambos previsibles por la mayoría demócrata. Aún no hay fecha, pero se espera que esto ocurra antes de fin de año.
Sin embargo, el Senado será cuestión distina (salvo giro de 180º que no se espera a día de hoy). En la Cámara Álta es necesario el voto favorable de dos tercios de los miembros para llevar a cabo el proceso de destitución y allí el Partido Republicano cuenta con 53 escaños frente a los 45 de la oposición demócrata (más otros dos atribuidos a independientes cercanos a los demócratas).
Pero 2020 es año electoral y quizás el ‘impeachment’ no logre su destitución, pero puede jugar un papel importante en el descrédito popular del presidente.