Paterna saca al aire los huesos de la Fosa 21

Este miércoles, a las diez de la mañana, un pequeño acto servirá de prólogo a los trabajos de exhumación de la fosa 21 del cementerio de Paterna, en Valencia. 82 años después de que 76 hombres y mujeres fueran fusilados tras permanecer fieles a la II República, un poco de justicia y de reparación aguarda bajo la tierra, esperando el trabajo de las rasquetas y las escobillas.

La población valenciana, conocida como el “paredón de España” porque alberga más de 60 fosas, con casi 2.300 víctimas maldescansando en ellas, va poco a poco sacando el hueso al aire, fosa a fosa. Ahora le toca a la que alberga a un grupo de asesinados entre el 15 y el 21 de julio de 1939, con la guerra supuestamente acabada pero la represión bullendo. Entre ellos hay guardias civiles, militares, jornaleros, pintores, tejedores, funcionarios municipales...

De manera excepcional, se ha logrado encontrar a 55 familiares de aquellos represaliados, de los que 16 son hijos, localizados incluso en el extranjero, en Francia o Brasil, en un trabajo de hormiga en el que han ayudado también las redes sociales. “Es emocionante, porque se están muriendo”, reconoce Pilar Taberner, la presidenta de la Asociación de Familiares de la fosa 21.

En conversación con El HuffPost, Taberner explica que fue en 2008 cuando las familias, tras un acto memorialista en Quart de Poblet (de donde proceden muchas de las víctimas), tomaron verdadera conciencia de que había que pelear por abrir la fosa y se unieron las familias. Sin embargo, no fue hasta ocho años después cuando se hizo el primer trámite institucional y se logró al fin la licitación y la ayuda de la Diputación de Valencia. Un ejemplo vivo de la labor incansable de las asociaciones por dar pasos, de la información histórica a la financiación pasando por los permisos, que ahora debería allanarse con nueva ley de Memoria Democrática.

Ahora, coordinados con la Conselleria de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, se ha hecho al fin la contratación pública con la firma Arqueoantro y se pueden empezar al fin los trabajos, que se calcula que duren dos meses. Gracias a la labor de documentación de estos años, se ha sabido que 12 cuerpos de los inicialmente enterrados en la fosa fueron recuperados en caliente por sus familias -“a saber cómo, a escondidas, pagando, pasando muchas calamidades”, dice Taberner-. Lo demás que esperan encontrar son restos perfectamente documentados, no hay nombres sin cerrar en estos trabajos.

Todos los muertos (entre los que hay tres mujeres, las tres primeras fusiladas en esta ciudad: Carmen Martínez, Bárbara Morella y Francisca Ballester, amas de casa de Catarroja) lo fueron por cuestiones ideológicas, en un territorio que se había mantenido al lado del Gobierno legítimo y en el que se concentraron republicanos de toda España; de ahí que en la lista (la encuentras completa al final del texto) hay andaluces, madrileños o extremeños.

La presidenta de la asociación busca a su tío abuelo, José Giner Navarro, un jornalero de 30 años de Quart de Poblet. Fue miembro de la UGT, afiliado a la JS Unificadas de su pueblo y secretario del Comité Revolucionario de la localidad durante la guerra. “Era el hermano de mi abuela, con la que me he criado. Ninguno de los hermanos que quedaron ha podido ver en vida este momento. Aunque de él se hablaba en mi casa, nunca se pasaba de las mismas tres frases. El día que fui a aquel acto de 2008 fue como una catarsis, tomé conciencia de la necesidad de saber y de buscar”, explica.

Con el tiempo han sabido que José formó parte de un grupo de nueve hombres de su pueblo que fueron los primeros en ser arrestados y asesinados, por su señalamiento político. Eso fue en abril del 39, cuando se proclamó el bando ganador de la guerra, pero su periplo luego fue largo y doloroso, hasta Torrent y luego hasta Valencia, donde consta en los archivos que en el “día de la libertad” fue condenado a muerte y fusilado.

“De la libertad... Lees esas cosas y duelen profundamente. He podido acceder al juicio sumario que le hicieron y, aunque ya sabes que los argumentos usados son mentira, verlos escritos, sabiendo que lo llevaron a la muerte, genera mucha impotencia”, relata la descendiente de Giner.

Hoy no queda nadie que lo conociera vivo para alegrarse de que sus restos vayan a ser buscados y llevados a un sepultura digna y en paz, sólo sobrinos. “Estamos perdiendo estas pocas oportunidades de reparar y que las familias lo sientan así”, lamenta Taberner. Al menos, le reconforta que al “mover” la historia se haya sabido, por ejemplo, que vecinos que llevaban de comer a los presos vieron a su tío abuelo sacando la cabeza por un carro en el que lo llevaban a matar.

“Detalles, pero que forman la historia”, corrobora. “Yo he estado en estos años trabajando con este monotema, porque lo necesitaba pero porque he podido hacerlo. Las cosas deben cambiar. El peso de la búsqueda, de saber, tiene que recaer en otros que no sean sólo las familias. Hemos tenido una comunicación estupenda, con más de mil personas que nos han ayudado, bien sean expertos en excavaciones o genealogía, familias, gente que ha aportado datos en las redes... pero la nueva ley debe ayudar a estabilizar estas búsquedas, con un presupuesto y unos protocolos”, anhela.

Pasada toda la travesía del desierto, ahora empieza la espera de cada familiar, de cada hueso. Desde la asociación, ya ha contactado con el equipo de la fundación Fisabio, encargado de crear una suerte de banco autonómico de ADN para hacer las pruebas a los descendientes más mayores, ante el riesgo del fallecimiento. Ellos serán los que analicen cada muestra de las que ahora se tomen tras ser desenterradas.

La espera la afronta Taberner con “satisfacción” porque se ha trabajado “muy duro, con mucho empeño y mucho corazón” y al fin se ve el resultado. “Queremos lo más básico que hay y que todos los que aún no tienen respuestas la tengan, como nosotros”, concluye.

* El acto de homenaje a las víctimas del fascismo se podrá seguir aquí, en la página de Facebook de Arqueoantro.

Lista completa de las víctimas enterradas en la fosa 21 de Paterna

-Bautista Vañó Sirera, 41 años, tejedor de Bocairent.

- Blas Insa García, 26 años, tejedor de Bocairent.

-Juan Bautista Gisbert Martínez, 36 años, tejedor de Bocairent.

-Agustí Calabuig Belda, 45 años, agricultor de Bocairent.

-Ángel Bernat Beneyto, 48 años, panadero de Bocairent.

-Tomás Beneyto Morales, 38 años, obrero de Bocairent.

-Ricardo Bernat Sempere, 41 años, tejedor de Bocairent.

-Francisco Ferre Miralles, 27 años, tejedor de Bocairent.

-Leopoldo Verdú Monerris, 44 años, vendedor ambulante de Bocairent.

-Manuel Ferre Martín, 33 años, mecánico de Bocairent.

-Manuel Galiana Asensio, 35 años, chofer de Bocairent.

-Julián Aparicio Moreno, 45 años, capitán de artillería profesional de Cartagena.

-Antonio Vacas Giménez, 41 años, agricultor de Córdoba residente en Bocairent.

-Jesús Lirio González, 38 años, camarero de Mislata.

-Francisco Martí Insa, 33 años, obrero de Ontinyent.

-José Soler Tortosa, 44 años, trabajador del textil de Ontinyent.

-José María Calatayud Alfonso, 56 años, secretario de ayuntamiento de Valencia.

-Joaquín Tirado Tomas, 63 años, coronel de infantería de Valencia.

-Tomás Escribano Martínez, 41 años, albañil y secretario de ayuntamiento de Cuenca.

-Manuel Segundo Eixea Vilar, 57 años, coronel de Villarreal.

-Ismael Valls Ferrer, 33 años, acomodador de Alfara del Patriarca.

-Salvador Lloris Épila, 40 años, agricultor de Alfara del Patriarca.

-Salvador Valls Molins, 53 años, mister de Alfara del Patriarca.

-Bartolomé Chapa Bondia, 41 años, relojero o ladrillero de Alfara del Patriarca.

-Bautista Esteller Soriano, 28 años, agricultor de Benicarló.

-Manuel Valverde Benítez, 32 años, jornalero de Jaén.

-José Pozo Sánchez, 25 años, cocinero de Caravaca de la Cruz.

-Tiburcio Martin Sorribes, 33 años, comercial de Castellón de la Plana.

-Juan Arín Melo, 32 años, comerciante de Castellón de la Plana.

-José Pastor Cañete, 27 años, pintor de Ontinyent.

-Manuel Turrón Torno, 32 años, impresor de Ontinyent.

-Enrique Soler Gramaje, 43 años, dibujante de Paterna.

-Jesús Reig (o Rey) Peña, 46 años, agricultor de Tavernes Blanques.

-José Alcaide Muñoz, 43 años, albañil de Benimàmet.

-José Huguet Miralles, 27 años, metalúrgico de Valencia.

-José Leiva Martínez, 52 años, marinero de Valencia.

-Manuel Gómez Coll, 24 años, chofer de Burjassot.

-Ánngel Modesto Puyuelo Villacampa, 34 años, abogado de San Felices de Ara.

-Juan Antonio Mondéjar López, 24 años, militar de Beas de Segura.

-Jesús Domínguez Moliner, 40 años, sargento de la Guardia Civil de Albacete.

-Marcelino Marín Solaz, 67 años, cantero de Calles.

-Argimino Sanz Cerezo, 39 años, comisario de policía de Madrid.

-Clemente Ortiz Fernández, 43 años, empleado de banca de Madrid.

-José Valor Gil, 45 años, jornalero de Ontinyent.

-Gerardo Montagut Úbeda, 31 años, ebanista de Ontinyent.

-José Llopis Calatayud, 33 años, chapista de Ontinyent.

-Francisco Ferrero Llopis, 26 años, ebanista de Ontinyent.

-Antonio Tormo Gandia, 28 años, zapatero (o espardenyer) de Ontinyent.

-Vicente Dado Gironés, 27 años, trabajador del textil de Ontinyent.

-Luis Montes Calabuig, 41 años, obrero de Ontinyent.

-Roberto Llin Jordán, 38 años, agricultor de Ontinyent.

-Antonio Soler Soler, 38 años, jornalero de Ontinyent.

-José Soler Soler, 33 años, agricultor de Ontinyent.

-José Torro Moya, 53 años, agricultor de Ontinyent.

-Aurelio Sayalero Adeba, 36 años, guardia civil de Medina del Río Seco residente en Valencia.

-Rafael Escturch Ribes, 27 años, sargento de la Guardia de Asalto del Ayuntamiento de Valencia de Valencia.

-Rafael Moya Pedro, 31 años, médico militar de Alicante.

-Juan Gómez López, 29 años, albañil de Benimàmet.

-José Romaguera Chanzá, 38 años, agricultor de Alcázar.

-Pràxedes Rocuina Embuena, 24 años, agricultor de Bugarra.

-Carmen Martínez Fortea, 40 años, ama de casa de Catarroja.

-Bàrbara Morellà Ribes, 35 años, ama de casa de Catarroja.

-Francisca Ballester Nogueras, 51 años, ama de casa de Catarroja.

-Marcos Gascón Cuevas, 44 años, jornalero de Losa del Obispo.

-Félix Royo Alcácer, 43 años, comerciante de Manises.

-Salvador Romaguera Badal, 30 años, agricultor de.

-Manuel Soler Gómez, 43 años, ladrillero de Quart de Poblet.

-Onofre Sanmartín Valldecabres, 36 años, obrero de Quart de Poblet.

-Àngel Sanmartín Vento, 52 años, obrero de Quart de Poblet.

-José Giner Navarro, 28 años, jornalero de Quart de Poblet.

-Antonio Monzó Fita, 35 años, industrial de Quart de Poblet.

-Pascual Monzó Real, 58 años, obrero de Quart de Poblet.

-Ramón Plan Sanz, 52 años, jornalero de Quart de Poblet.

-Francisco Soriano Martínez, 52 años, obrero de Quart de Poblet.

-Sandalio López Giménez, 38 años, industrial de Quart de Poblet.

-Salvador Blasco Serer, 53 años, agricultor de Torrent.