Pablo Casado culpa a la Semana Santa de sus malos resultados
Y las reacciones en redes sociales no tardan en llegar: "Surrealista".
Pablo Casado asumió pocos minutos después de conocer los resultados de las elecciones su derrota e hizo un análisis de las causas que, según él, produjeron el hundimiento del partido. Aunque se regocijó de no eludir responsabilidad, el líder del PP dejó de lado la autocrítica y atribuyó la pérdida de la mitad de sus diputados a la fragmentación... y a la Semana Santa.
“El resultado ha sido muy malo”, comenzó diciendo. Tanto que, desde tiempos de Fraga, los populares nunca habían bajado de los 105 diputados. Pero no solo eso, los 66 parlamentarios en los que el partido se ha estancado tienen más lecturas: el cuestionamiento del liderazgo de Casado y de la derechización que ha impuesto y el peligro de Ciudadanos, pisándole los talones a poco más de 200.000 votos.
Según Casado, estos datos son resultado de la fragmentación de voto –“Al fracturarse, se convierte en un opción difícilmente ganadora”– y, atentos escépticos, de “una campaña compleja, con la Semana Santa y a pocas semanas de las elecciones de mayo”.
“Habíamos avisado de que eso tenía unos problemas a la hora de realizar la campaña y también probablemente está bien medido a la hora de optimizar los resultado en el partido de gobierno”, dijo Casado, desatando la incredulidad de los usuarios de las redes sociales.