No todo vale
No todo vale en general y no todo vale en campaña. Primero, por el bochorno que nos produce ver a los líderes políticos haciendo el ridículo cada vez que se descabalga una mentira. Y segundo, por el bochorno que nos produce ver a los líderes políticos haciendo el ridículo cada vez que se descabalga una mentira.
Sí. Lo he dicho dos veces. Es el mínimo de veces que hay que repetirles las cosas a los niños. A los políticos y a los niños. Los niños tienen una excusa cronológica preciosa. ¿Cuál es la vuestra? Esta pregunta en prensa es retórica. En Twitter, una nueva ocasión para seguir desvirtuando la comunicación real y omitir las necesidades de la sociedad. Las elecciones se ganan con fake news de 280 caracteres, "idiotas que sois unos idiotas". Esto es lo que suena en mi cabeza cada día, cada entrevista, cada vídeo que veo. Un darse autobombo vergonzante. Tuits "sofisticados" cargados de la nada.
No todo vale. No vale haberse cargado unos Presupuestos que necesitábamos como respirar para dar alivio a través de las políticas sociales a una sociedad hastiada después de tanta crisis y tanto recorte. Una población con un porcentaje pornográfico e inmoral de exposición a la pobreza y exclusión social.
No vale decir que es bueno bajar los impuestos para precarizar la educación y la sanidad y tener una gran excusa para privatizarla mordiendo un pastel que cocinamos entre todas y todos con el sudor de la precariedad laboral.
No vale decir que la rebaja de impuestos es para los pobres cuando la verdad sería apostillar que las únicas bajadas se las beben las grandes fortunas.
No vale decir que cumples la Constitución en cuanto a la progresividad del sistema fiscal cuando sencillamente es falso porque los impuestos que promueves son los regresivos.
No vale decir que los inmigrantes roban y extorsionan, que el diálogo es el diablo, que la política es la negación y el cordón sanitario. No vale decir que quieres lo mejor para tu país cuando te importa un carajo. No vale todo, porque el único todo que te importa son tus privilegios por encima de todo.
No vale repartir dividendos cuando el mayor progreso e inversión de un país se produce cuando la redistribución genera más masa salarial. No vale decir que la economía se desacelera por nueve meses de un Gobierno con 84 diputados, ya que se trata de una estimación de tan sólo unas décimas que se debe además a la desaceleración internacional que hace que se reduzcan las exportaciones. No vale decir que el consumo cae sin decir que es porque los salarios no dan para más.
No vale todo cuando tu todo es la nada de la gente. No vale todo cuando el todo debería ser el todo, sin ti, que por algo eres lo único que restas. No vale todo.