Los supuestos centros culturales que sirven de comisarías chinas camufladas en Europa
Tras el informe de la ONG Safeguard Defenders, comienza a mostrarse cómo funcionaba la red que tomaba a fugitivos de su país para convencerles de que retornen.
La voz de alarma la dio hace dos semanas la ONG Safeguard Defenders: China ha creado en el extranjero comisarías clandestinas desde las que sus fuerzas de seguridad presionan a fugitivos de su país para convencerles de que vuelvan a su país para ser juzgados. Una red que empezó a extender en 2014 y que ha llegado también a Europa, también a España.
La organización ha desvelado que casi todas las personas a las que China ha querido localizar en el extranjero, cerca de 10.000, han regresado a su nación, con las sospechas que generan estas prácticas parapoliciales, escondidas bajo fines de servicios consulares a sus ciudadanos en el extranjero.
Desde que Safeguard Defenders anunció por primera vez en septiembre la existencia de 54 de estas llamadas “comisarías 110” (bautizadas así por la ONG de acuerdo al número de teléfono para llamar a la policía en China) en diversos países, el grupo ha denunciado que hay otras 48 adicionales.
Ahora, medios como Euronews han ido sobre el terreno para mostrar cómo se ocultaban estas comisarías. Por ejemplo, cuentan el caso de la ciudad de Prato, en la Toscana italiana, la que mayor población china tiene en todo el país, donde han grabado un supuesto centro cultural que, en realidad, servía a los agentes para otros propósitos: forzar el retorno de emigrantes.
“Este centro lleva semanas cerrado desde que salieron a la luz las primeras denuncias. Según el último informe de la organización, en al menos 83 casos se han utilizado locales como éste para obligar a disidentes chinos a regresar a su país”, indica su información. Sin embargo, cuando se consulta a los locales, nadie tiene ni idea ni pistas de lo que pasa tras la puerta de ese edificio.
Según el informe, Italia es un caso especial, porque es uno de los pocos que aún no ha puesto en marcha una investigación a gran escala sobre el caso, cuando además “es el país con el mayor número de comisarías de policía de este tipo en todo el mundo”. Ya se están planteando preguntas parlamentarias para que el Gobierno explique lo que sabe.
Niega la mayor
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China declaró el jueves que “no existen en absoluto” comisarías secretas chinas en países extranjeros. “China siempre se ha adherido al principio de no injerencia en los asuntos internos de cada nación y cumplido el derecho internacional”, explicó en una rueda de prensa la portavoz de la Cancillería Mao Ning, que añadió que el país asiático “respeta la soberanía judicial de todos los países”.
En las últimas semanas, países como Japón, Corea del Sur, Canadá, Alemania o Países Bajos han iniciado pesquisas sobre la posible existencia de comisarías clandestinas chinas dentro de sus fronteras.