Dario Ianes es un popular pedagogo originario de Italia. De hecho, da clases en esta materia en la Universidad de Bolzano, ha publicado varios libros acerca de su campo de especialidad y, ahora, la publicación italiana Il Riformista ha recogido unas declaraciones suyas. 

En ellas, el experto ha hablado acerca de lo que opina sobre los docentes de apoyo. Él lo considera "estructuralmente débil". Así lo ha dicho antes de proseguir su explicación.  

Su punto de vista tiene que ver con que este tipo de docentes, "aún siendo titular, su permanencia en una escuela depende de la presencia de estudiantes con discapacidad certificada, mientras que para otros docentes este no es el caso". 

El pedagogo encuentra en este rol "una condición precaria que penaliza esta figura", ha sentenciado. Entonces, ante la respuesta de qué hacer con ella ha sido claro: "Hay que abolir el profesor de apoyo". 

Su argumento pasa por integrarlos como profesores dentro de la plantilla. "Los mejores entre ellos podrían llegar a ser expertos y supervisores, llamados a apoyar a sus colegas de las disciplinas del campo en la personalización real de la propuesta didáctica", ha considerado. 

En esta línea, ha considerado que para que los apoyos, en caso de que –según él–, se puedan incluir "en serio" en un proyecto educativo, "hay que desvincular al docente de la docencia". "Apoyar a los estudiantes y a los profesores es un trabajo serio, no puede ser una actividad after-work con incentivos para profesores ya agotados", ha añadido.