La Junta Electoral autoriza a ERC a hacer un acto en la cárcel de Lledoners
Allí estuvieron presos durante meses la mayoría de los exconsellers juzgados por rebelión en el Tribunal Supremo.
La Junta Electoral de Barcelona ha autorizado al candidato de ERC Gabriel Rufián que celebre el próximo jueves, 18 de abril, un acto de campaña de las generales en la cárcel de Lledoners, donde estuvieron presos durante meses la mayoría de los exconsellers juzgados por rebelión en el Tribunal Supremo.
En un escrito, al que ha tenido acceso Efe, la Junta Electoral Provincial de Barcelona autoriza que Rufián celebre este acto, tras recibir el aval de la consellería de Justicia, que lo ve ‘pertinente’ siempre que el mitin no sea multitudinario, no afecte a las actividades del centro y que sólo asistan los presos que hayan pedido ejercer su derecho a voto.
Según la Junta Electoral, el debate de los programas de las distintas candidaturas que concurren a las elecciones con los internos en centros penitenciarios ‘favorece’ los derechos de los presos, en especial el de participación política.
De hecho, la Junta Electoral Central ya autorizó en 2018 un acto electoral en un centro penitenciario con motivo de las elecciones andaluzas.
La Junta provincial ha adoptado esta decisión después de que la Secretaría de Medidas Penales, Reinserción y Atención a la Víctima de la Generalitat ha concluido que, para que los presos tengan una información ‘precisa’ a la hora de votar, ‘sería pertinente autorizar la entrada de los candidatos en los centros penitenciarios’ para que lleven a cabo actos de campaña.
En un informe remitido a la Junta Electoral, la Generalitat enfatiza que la normativa penitenciaria no establece ‘ninguna prohibición expresa’ para celebrar actos electorales en prisión, ‘sin perjuicio de las cuestiones de seguridad interior que se puedan establecer’.
Por este motivo, ve ‘posible’ que los partidos puedan realizar actos en las cárceles, aunque con ‘limitaciones’ de seguridad y de respeto al pluralismo político, la transparencia, la proporcionalidad y la neutralidad.
Horas después de recibir el informe favorable de la Generalitat, la Junta Electoral ha autorizado hoy mismo la petición de ERC para celebrar el acto electoral de Rufián el 18 de abril en Lledoners, con las limitaciones y exigencias establecidas por instituciones penitenciarias.
Según la Junta Electoral, en el informe de la Generalitat ‘queda salvaguardado el deber de neutralidad política que los poderes públicos deben observar estrictamente durante los periodos electorales, así como el respeto a los principios de transparencia, objetividad e igualdad entre los candidatos’.
Al igual que la conselleria de Justicia, la Junta Electoral recuerda que la Constitución permite votar a los condenados a prisión, a excepción de los que tengan expresamente limitado este derecho, y que el mecanismo habilitado es el voto por correo.
Las restricciones fijadas por la Generalitat para autorizar que los candidatos hagan campaña en las cárceles suponen que cada partido político podrá realizar un único acto en el interior de cada centro penitenciario, sin superar los 60 minutos y sin afectar las actividades que se llevan a cabo en la ‘vida ordinaria’ de cada prisión.
La conselleria de Justicia también deja claro que los actos no pueden ser multitudinarios, ya que el número de asistentes se tendrá que adaptar a la capacidad del lugar elegido para su celebración, que será decidido por la dirección de cada centro.
Los presos que están en condiciones de poder ejercer su derecho a voto en cada proceso electoral son los únicos que podrán acudir a los actos de campaña en la cárcel, sin contar con los que estén en primer grado, que lo tienen vetado.
El candidato que protagonizará el acto en prisión, en este caso Rufián, podrá acceder al centro acompañado de dos personas de su gabinete, según las restricciones establecidas por la Generalitat.
Además de la cárcel de Lledoners, ERC también ha pedido permiso a la Junta Electoral, en este caso a la de Girona y la de Tarragona, para que autorice sendos actos electorales en las cárceles de Puig de les Basses (Girona), donde estuvo encarcelada la exconsellera Dolors Bassa, y Mas d’Enric (Tarragona), en la que permaneció la expresidenta del Parlament Carme Forcadell.