La Guardia Civil llama a declarar a una periodista de 'Espejo Público' tras lo que ha ocurrido en el programa
"No sabemos exactamente a qué".
La Guardia Civil continúa investigando el hallazgo de un cadáver descuartizado en una zona de campo del municipio madrileño de Chapinería y trata de confirmar si, como dicen los vecinos, la víctima es una mujer de 70 años a la que hace días que no veían y que pudo ser asesinada por un conflicto familiar.
Las alarmas saltaron en este municipio de la sierra oeste de Madrid, de apenas 2.400 habitantes, sobre las siete de la tarde de ayer martes, en un paraje próximo al Camino de las Maderas.
Un hombre que paseaba con su perro en la zona encontró un pie que sobresalía de una bolsa de plástico enterrada en el suelo, detallan a Efe fuentes del instituto armado este miércoles.
Para informar del asunto, la periodista de Espejo Público Tania Taboada se ha desplazado al pueblo y ha entrado en la casa de una mujer que está desaparecida y que podría ser la hallada muerta. Allí ha entrevistado a África, hija de esa persona.
Tras la entrevista, la Guardia Civil ha citado a la periodista a declarar. Así lo han confirmado desde el plató de Espejo Público, donde ha subrayado que la informadora hizo la entrevista dentro de la casa porque todavía no estaba precintada.
“En el momento en que han salido de la entrevista, la Guardia Civil ha precintado la calle, ha precintado la casa, suponemos que entrará a recabar pruebas, datos o lo que tenga que hacer ahí. El caso es que a nuestra compañera le han invitado a que vaya con ellos, con la Guardia Civil, al cuartel. No sabemos exactamente a qué. Si a que dé testimonio de lo que ha ocurrido en esa entrevista o quizá a tomar las huellas suyas para descatarlas de la investigación”, han explicado desde el programa.
Tras ello, han entrevistado telefónicamente a la reportera, que ha contado su versión de los hechos. “Yo accedí a la casa, llamé y vi que alguien se asomaba a la puerta y entonces empecé a llamar África, África y me abren”, ha relatado.
“Y entonces era ella y una amiga y entré hasta la cocina. He estado hablando con ella tranquilamente, después de que la había entrevistado, estaba fumando un cigarro, estaba llorando y en esto aparece la guardia civil”, ha continuado la periodista antes de explicar que fue entonces cuando una agente le preguntó si ella era redactora y le ordenó salir de allí.
“Una agente me requiere el teléfono móvil, me dice que si estuve grabando, le digo que no porque para eso está mi cámara. Luego ya vienen tres agentes de protección ciudadana y me dicen que tengo que ir a la comandancia de Tres Cantos a hablar con el grupo de homicidos e intuyo que va a ser para tomar huellas, porque hemos entrado antes de proceder al registro y pueden aparecer ahí pruebas y huellas nuestras”, ha concluido.