Javier Ruiz explica el escándalo de las mascarillas y sentencia a los comisionistas con una frase

El periodista Javier Ruiz ha analizado en su programa, Las Claves del Siglo XXI, el espacio de debate y entrevistas en RTVE, las comisiones millonarias que percibieron los empresarios Luis Medina y Alberto Luceño por intermediar en la entrega de material sanitario para el Ayuntamiento de Madrid.

Al comunicador le ha bastado un minuto para relatar el “monstruoso” sobrecoste que hubo en la compra de mascarillas, guantes y test de antígenos por parte del Consistorio madrileño, en el mes de marzo de 2020.

Javier Ruiz ha utilizado los datos de la Fiscalía Anticorrupción para asegurar que los 15 millones de euros “no pagan la mercancía”. “De momento lo que la Fiscalía dice es que el pecado ha sido un sobrepago y un precio monstruoso”, ha señalado.

“Se pagaron 15 millones de euros por un millón de mascarillas, 2,5 millones de guantes y por 250.000 pruebas de antígenos. Pero lo que se paga, esos 15 millones de euros, no pagan la mercancía. De echo no pagan, fundamentalmente, la mercancía, lo que pagan son comisiones”, ha justificado el comunicador.

Después de mostrar que de los más de casi siete millones de dólares que costó la adquisición de un millón de mascarillas, tres millones estaban destinados a la mordida de Alberto Luceño y un millón pertenecía a la comisión del empresario Luis Medina.

Pero no es la única comisión. Javier Ruiz ha justificado que, según las cifras de la Fiscalía, ambos empresarios habrían recibido un total de 11 millones de euros, de los 15 millones de euros que pagó el Consistorio madrileño por el suministro del material sanitario.

″¿Se acuerdan de las comisiones de los Pujol? ¿Se acuerdan de ese 3%? Bueno, pues esto es un 148% de comisión. Esto es lo que tenemos. Una comisión que es todavía mayor que lo que los empresarios entregan”, ha reconocido.

El periodista ha sentenciado a ambos comisionistas, recordando algunas de las palabras que Medina y Luceño habían empleado años atrás: “Estos empresarios son los mismos empresarios que habían defendido aquello de ‘honor’, ‘honradez’ y ‘otros valores’”.