Italia hace un desembarco selectivo de migrantes rescatados en el mar: los hombres, rechazados
Esa "acogida a la carta" es contraria al Derecho Internacional, recuerdan a la ultra Meloni los partidos de la oposición y las ONG.
Giorgia Meloni es ya la primera ministra de Italia y, por mucho azúcar que le añada a su nueva carta de presentación, neofascista es. Su principal apoyo en el Gobierno es la Liga Norte, tan ultraderechista como ella. Así que no sorprenden, aunque ponga buena cara en Bruselas, sus primeros pasos en materia de inmigración, una de sus banderas: Meloni se está saltando todos los tratados internacionales y permitiendo un desembarco selectivo de migrantes, rescatados por ONG en el mar Mediterráneo. Ha decidido acoger sólo a los más “necesitados”: mujeres embarazadas, niños y enfermos. Las demás personas deben permanecer en aguas internacionales hasta que los estados de bandera de los barcos se hagan responsables de ellos.
Es el primer ejemplo de la política anti-inmigración del reciente Ejecutivo, que llevaba en su programa electoral sin ocultarlo, que está siendo muy criticado tanto por partidos de la oposición como por ONG locales y organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos. La acogida a la carta, recuerdan, es contraria al Derecho Internacional, porque todos los seres humanos deben tener la opción de pedir asilo, sin excepción.
A los de Meloni les han respondido los gestores del barco de rescate Humanity 1, que han desobedecido la orden de zarpar del puerto italiano de Catania con 35 de los migrantes rescatados aún a bordo, los que quedaron tras el desembarco de los niños y sus madres. “En torno a las 11.30 horas se ha pedido al Humanity 1 abandonar el puerto de Catania con 35 supervivientes a bordo. El capitán ha rechazado esta orden. La Ley del Mar le obliga a llevar a todos los rescatados en el mar a puerto seguro”, ha explicado la ONG alemana SOS Humanity, propietaria del barco, en un mensaje publicado ayer en Twitter.
La organización ha destacado que “los supervivientes tienen derecho a una evaluación de la protección individual y eso solo se puede hacer en tierra. Devolver al mar a estas 35 personas que buscan protección en aguas territoriales es una forma de expulsión colectiva y por tanto es ilegal”. La ONG considera que todos los migrantes son refugiados.
Un total de 144 migrantes han desembarcado del buque, todos menores de edad, incluido un recién nacido. Han sido atendidos por efectivos de Protección Civil y voluntarios de la Cruz Roja Italiana que proporcionaron agua, café, pañales y mantas a los recién llegados.
Las medidas están en consonancia con la política anunciada recientemente por el ministro italiano de Interior, Matteo Piantedosi, miembro del gobierno dirigido por Meloni, que había prometido endurecer la política migratoria nacional durante su campaña. Italia permite ahora el desembarco de hombres con heridas, mujeres y niños, en general, pero quiere responsabilizar a los países en los que están registradas las embarcaciones de rescate. En el caso del Humanity 1, ese país es Alemania.
El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani (del partido Forza Italia, la derecha clásica italiana), ha pedido este domingo una solución a nivel de la Unión Europea al problema de los inmigrantes que llegan en barco. En declaraciones a Il Messaggero, Tajani ha explicado que es correcto aceptar a los enfermos, las mujeres y los niños, si bien ha reconocido que el Gobierno ha reforzado su política de identificación. “No podemos convertir el Mediterráneo en un cementerio, pero tenemos que saber quiénes están a bordo, de dónde vienen y dónde fueron recogidos”, ha indicado.
“Una violación”
Amnistía Internacional y la oposición italiana han rechazado esta acogida selectiva y han advertido de que supone una violación del Derecho Internacional. “Es una violación del derecho internacional, es una violación de la Convención de Ginebra sobre refugiados”, ha subrayado el presidente de Amnistía Internacional Francia, Jean-Claude Samouiller en declaraciones a RFI.
″¡No clasifiques a la gente así! Al contrario, les acogemos en el territorio y les facilitamos los trámites si desean solicitar asilo y tras un examen en profundidad e individual de cada persona para saber si tiene o no derecho al estatuto de refugiado, que depende de cómo sean perseguidos en su propio país, para que no devolvamos a las personas sin haberles ofrecido solicitar asilo”, ha argumentado.
Samouillier ha recordado además la situación de los inmigrantes en Libia, que ha descrito como “absolutamente infernal”: “hay prostitución forzada, violación, tortura de inmigrantes, trabajos forzados”. “Algunos se encuentran en una situación de esclavitud y la Unión Europea no puede ser cómplice de esta indignidad”, ha espetado.
“Es absolutamente necesario que los países de la Unión Europea respeten el derecho internacional y salven a las personas en el mar. No pueden transigir con el derecho de asilo y la Unión Europea debe estar a la altura de sus compromisos internacionales y de los valores sobre los que se fundó Europa”, ha remachado.
También el diputado de Alianza Verde y de Izquierda Aboubakar Soumahoro ha criticado desde el propio puerto de Catania esta “acogida selectiva”. “Estoy indignado, no se puede especular con bebés, mujeres, niños, gente agotada por el cansancio, traumatizada y agotada por el frío, por lo que está pasando”, se ha lamentado en declaraciones recogidas por la agencia de noticias italiana AGI.
El secretario general del Partido Democrático, Enrico Letta, ha criticado en Twitter esta política “inaceptable” y “contraria a los principios de humanidad y las normas internacionales”.
“La elección del Gobierno de distinguir arbitrariamente quién puede desembarcar y quién no, también parece estar desprovista de cualquier base legal”, ha añadido la portavoz del Partido Democrático en la Cámara de Diputados, Debora Serracchiani.
“Le pedimos al ministro Piantedosi que venga a la Cámara para informar sobre las opciones tomadas para el desembarco del Humanity 1 en Catania”, ha añadido. “Estas opciones parecen ilegítimas, contrarias al Derecho Internacional e inaceptables desde un punto de vista humanitario”, ha remachado.
Otras tres embarcaciones operadas por organizaciones privadas de rescate y que transportan a inmigrantes rescatados están paradas frente a la costa oriental de Sicilia a la espera de recibir autorización de un puerto. Los buques Rise Above (95), Geo Barents (572) y Ocean Viking (234) llevan un total de 901 migrantes rescatados.