Las hermanas del colegio de Cáceres cuyos padres se negaban a que llevaran mascarilla regresan a clase
Tras tres días sin que las niñas acudieran al centro, finalmente han vuelto con la mascarilla puesta.
Las dos hermanas alumnas del CEIP Alba Plata de Cáceres, cuyos padres se negaban a que acudieran al colegio con mascarilla, han regresado este martes al centro con este elemento de protección frente al coronavirus.
El secretario general de Educación de la Junta de Extremadura, Francisco Javier Amaya, se ha felicitado porque este conflicto se haya resuelto finalmente en el ámbito educativo, con la mediación de las tutoras, “la mano tendida” de la directora del colegio y “la buena predisposición siempre al diálogo constante con la familia”.
Amaya ha resaltado, igualmente, el buen talante de la familia afectada “a la hora de escuchar cuál era la situación que se estaba viviendo”. El responsable de Educación de la Junta se ha felicitado por el buen resultado de “los procesos y estrategias de mediación” en este conflicto, sin necesidad de acudir a otras instancias fuera del ámbito educativo, donde los problemas, ha recordado, “siempre se abordan desde el diálogo”.
Tres días sin acudir al centro
Tras tres días sin que las niñas acudieran al centro, después de que la Consejería de Educación y Empleo determinase que no podrían entrar en el colegio si no respetaban las medidas de protección establecidas, las niñas han vuelto a clase con mascarilla y “la jornada escolar se ha desarrollado no solo con normalidad, sino con alegría”.
Según Amaya, con “la alegría de la comunidad educativa y con un gesto muy simbólico, con los aplausos de los compañeros de las dos alumnas”, que cursan tercero y quinto de Primaria.
Ha destacado que en este conflicto, por parte la Consejería de Educación y Empleo, “siempre ha primado el interés superior del menor, la integridad de estas niñas, sin poner en peligro la salud y la seguridad del resto de miembros de la comunidad educativa”.
Por otra parte, ha explicado que, independientemente de que el problema se haya resuelto, la Junta de Extremadura continuará solicitando a la Fiscalía el informe que había pedido en relación a este caso, “sobre todo para que nos sirva de ejemplo, parar tener en cuenta cómo actuar cuando no prime el interés superior del menor”.
Con respecto a cualquier responsabilidad de los padres, Francisco Javier Amaya ha dejado claro que la Consejería da por “resuelto el conflicto, porque evidentemente hay un entendimiento de todas las partes y porque se ha recuperado la normalidad siempre desde la aplicación de las normas y de los protocolos del contexto educativo”.
Finalmente, ha pedido la colaboración de los medios de comunicación para que el CEIP Alba Plata de Cáceres y las dos niñas afectadas “dejen de ser el foco de atención” y el centro pueda retomar el curso escolar con total normalidad.