García-Page: "La política no está ayudando a combatir el virus"
El presidente castellanomanchego hace autocrítica y reconoce que los ciudadanos "no perdonarían una segunda ola de ingenuidad”.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, entona el mea culpa. En una entrevista en el programa Espejo Público (Antena 3), el socialista ha reconocido que “la política no está ayudando a combatir el virus” y que la gente “no perdonaría una segunda ola de ingenuidad” a los mandatarios.
“Veo en todos los Gobiernos preocupación. Nadie quiere que haya muertos, todos actuamos de buena fe”, sostiene, pero eso no quita para que las cosas no se estén haciendo todo lo bien que se debía hacer.
El mandatario ha admitido que “la clase política nacional como educadora tendría un suspenso monumental”. El mejor ejemplo ha tenido lugar esta semana, cuando el propio García-Page y Alfonso Fernández Mañueco, presidente de Castilla y León (PP), se reunieron esta semana con su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso, para tratar de pactar un confinamiento común. Reconoce que “después de las resoluciones del Gobierno de España casi he salido confuso con todo”.
Para García-Page “el planteamiento de fondo es si asumimos que los grandes desplazamientos facilitan la transmisión del virus” y ha apuntado que entiende que “la ciudadanía esté desorientada porque el virus es el mismo en toda España y la receta tendría que ser la misma. La política no está ayudando a combatir el virus”.
La Comunidad de Madrid permanecerá confinada perimetralmente desde la medianoche de ayer, durante el puente de Todos los Santos, después de que el Gobierno central haya aceptado el plan de Díaz Ayuso de cerrar la región por días, hasta que el miércoles el Consejo Interterritorial de Salud debata los criterios de aplicación de las medidas adoptadas por las autonomías.
El cierre final de Madrid
De esta forma, el cierre de la Comunidad de Madrid será efectivo esta medianoche con la publicación del decreto regional en el Boletín Oficial (BOCM) que limita las entradas y las salidas, salvo por causas justificadas, durante este puente y el de La Almudena (9 de noviembre), aunque la decisión sobre este último se tomará en la reunión del Ministerio de Sanidad con los consejeros del resto de las autonomías.
Mientras tanto, seguirán vigentes las medidas de restricción perimetral que las comunidades adopten de cara a este fin de semana, puente en varias de ellas, según ha informado el Ministerio que dirige Salvador Illa.
La presidenta madrileña anunció ayer su decisión de cerrar la Comunidad de Madrid los dos próximos puentes, a pesar de que el decreto de estado de alarma que da cobertura a estas medidas estipula el confinamiento perimetral por semanas (cuando se considera que surte efecto).
Aunque la jornada ha comenzado con una nueva polémica a cuenta del plan de Ayuso de cerrar la región solo durante los puentes, finalmente el Gobierno ha dado luz verde al plan de Ayuso aunque no va a modificar el decreto, que ya ha sido aprobado este jueves en el Congreso con los apoyos parlamentarios habituales del Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos y de Ciudadanos.
El Gobierno autonómico establece también en el decreto regional el confinamiento perimetral de la región durante el puente de La Almudena desde las 00.00 del viernes 6 de noviembre hasta las 00.00 del martes 10, aunque se abordará a partir del miércoles en el Consejo Interterritorial.
Según el Gobierno regional, con los cierres durante solo los puentes “se cumple con los siete días mínimos establecidos en el real decreto del estado de alarma dictado por el Ejecutivo central”.
Ayuso ha celebrado que el Gobierno “nos haya permitido cerrar la Comunidad de Madrid por días”. “Así seguiremos acometiendo nuestro plan de medidas quirúrgicas para cada situación y colaborando con otras comunidades autónomas, es un gran avance para todos”, ha escrito Ayuso en su cuenta de Twitter.
La presidenta madrileña solicitó este miércoles por carta al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, la modificación del decreto después de reunirse con los presidentes de Castilla La Mancha y Castilla y León, Emiliano García Page y Alfonso Fernández Mañueco, respectivamente, quienes sí han decretado el confinamiento perimetral de sus comunidades hasta el 9 de noviembre y que han reconocido que pensaron que Ayuso también estaba de acuerdo en hacerlo de forma coordinada. Pero durante la comparecencia, Ayuso anunció que pediría al Gobierno esa flexibilidad en las fechas del confinamiento, y fuentes de la Consejería de Sanidad aseguraron que poco después el ministro de Sanidad, Salvador Illa, habría dado luz verde a esta medida en una conversación telefónica con el consejero Enrique Ruiz Escudero.
Evitar la confusión
Sin embargo, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha subrayado que el Gobierno no va a cambiar el decreto, ya aprobado, como ha reclamado Ayuso, a la que ha acusado de hacer esta petición de forma “calculada” para crear mucha más confusión.
“No podemos trasladar esta confusión y esta inseguridad a los madrileños”, ha dicho Calvo antes de la votación de la prórroga del estado de alarma hasta el 9 de mayo de 2021.
Finalmente, el Ministerio de Sanidad informó ayer de que se mantiene esta modalidad de confinamiento hasta el próximo martes, pero queda en el aire lo que sucederá de cara al puente de La Almudena. En el Gobierno regional, la decisión de Ayuso discrepa con la voluntad de su socio, Ignacio Aguado (Cs), que pretendía cerrar Madrid hasta el 9 de noviembre, al igual que han decretado Castilla y León y Castilla-La Mancha.
Ambos gobiernos regionales estaban “convencidos” de que había un acuerdo entre las tres regiones sobre el cierre perimetral, ya que Ayuso no dijo “con literalidad” que iba a desmarcarse del pacto, según dijo también ayer García-Page.
Desde Castilla y León también han afirmado “había un acuerdo claro sobre la delimitación perimetral” de los territorios, ha declarado la consejera de Sanidad castellano leonesa, Verónica Casado.
Los consejeros de PP han respaldado el plan de Ayuso y lo asumen como “una interpretación del decreto del estado de alarma” con la finalidad de, dentro de los siete días de aplicación obligatoria de la restricción de movilidad que prevé el estado de alarma, “diluirlos en los dos puentes”, ha indicado el consejero de Sanidad. En esta línea, el consejero de Justicia, Enrique López, ha subrayado que el estado de alarma permite a las comunidades introducir “flexibilidad” en las medidas para contener la Covid-19.
Según López, la prohibición de las entradas y salidas de Madrid durante los puentes no requerirían que fueran avaladas por la justicia, ya que el Ejecutivo central ha otorgado “un poder delegado” a las comunidades con el estado de alarma.