Feijóo se desvanece en su primer cara a cara con el presidente
Puso al descubierto “el defecto Feijóo” en lugar del “efecto Feijóo” que es la falta de solvencia y el más de lo mismo.
Máxima expectación en el primer cara a cara entre el Sr. Feijóo y el presidente Pedro Sánchez en el Senado. Nunca se habían visto tantos periodistas en la Cámara Alta. Pero el nuevo líder del PP se ha vuelto a equivocar.
Tanto que presume el Sr. Feijóo de ser un gran estadista de políticas económicas y en su primera intervención, al poco de comenzar, confundió la prima de riesgo con el tipo de interés, haciendo el ridículo. Puso al descubierto “el defecto Feijóo” en lugar del “efecto Feijóo” que es la falta de solvencia y el más de lo mismo.
Pero esto podría ser solo una anécdota dentro del debate, si no fuese porque ha quedado clara su poca altura política. Ha vuelto a reiterar e insistir en el argumentario del PP. Plantea un plan de ayudas a las familias; entonces, ¿por qué su partido votó en contra de 16.000 millones para ayudar a familias y empresas ante los efectos económicos de la guerra hace pocas semanas? ¿Por qué cuando gobernaba Rajoy y España era líder en pobreza infantil junto a Rumanía se negaron a aprobar un plan contra la pobreza infantil ¿O de eso ya no se acuerdan?
Feijóo ha vuelto a insistir en el Senado sobre la necesidad de bajar los impuestos, ¿se ha olvidado de que su amigo y presidente Rajoy subió más de 50 veces los impuestos? Y lo que es peor ¿no ha escuchado que tanto el FMI, la UE, como el Banco de España aseguran que no es el momento de bajar impuestos?
El líder del PP ha tratado de dar la imagen de que el presidente del Gobierno no escucha ni acuerda con nadie y se ha vuelto a equivocar. Pedro Sánchez le ha recordado que ha llegado a acuerdos con todas las fuerzas políticas salvo con la ultraderecha y con el PP. Ha hecho referencia a las más de 20 Conferencias de Presidentes que se han celebrado. Y por último, ha destacado los 14 acuerdos con los agentes sociales, con sindicatos y empresarios, en temas tan importantes como la nueva reforma laboral que ha permitido aumentar el empleo y la calidad de este, la subida de pensiones según IPC o la mejora de la financiación de la Dependencia que el PP recortó. Nunca se ha trabajado más por acuerdos en nuestro país que con este Gobierno.
El presidente Pedro Sánchez ha apuntado que hace dos meses se reunió con Feijóo en la Moncloa ofreciéndole 11 acuerdos sin resultados. Le planteó reformar el Consejo General del Poder Judicial; reformar el articulo 49 de la Constitución eliminando la palabra “disminuido”, y le ha criticado “su falta de coraje” ante lo que dijo el vicepresidente de Castilla y León de Vox.
También le propuso un acuerdo para hablar bien de España fuera del país. Todo ello ha tenido poco éxito porque la realidad es que ni a Feijóo ni al PP le interesan los intereses de España. Sólo están preocupados por los suyos.
El presidente ha hecho pedagogía al señalar que España está haciendo, ante los efectos económicos de la guerra, lo mismo que hacen todos los gobierno de la UE. Desde el diálogo con los sectores afectados destinar ayudas directas a dichos sectores, como el del transporte o el sector primario. Además de proteger a más de dos millones de hogares con el bono eléctrico y bajadas selectivas a impuestos, como reducir un 60% los impuestos relacionados con la factura de la luz.
En este punto, el presidente Pedro Sánchez le ha recordado a Feijóo que hay que ser útil al país en el gobierno, pero también en la oposición. Ha señalado que los socialistas desde la oposición firmamos un pacto contra el terrorismo y contra la violencia machista, y ha insistido en que es violencia de género y no “intrafamiliar”.
Por último ha puesto a Feijóo en la siguiente dicotomía: O precarizamos las relaciones laborales como hizo el PP o mejoramos las condiciones laborales de los trabajadores. O devaluamos los sueldos o tenemos salarios mínimos de 1.000 euros. O revalorizamos las pensiones de acuerdo al IPC o condenamos a nuestros pensionistas o subidas del 0,25%. La respuesta que tiene que dar el PP es o derechos sociales o retrocesos sociales. Y con la palabra y los hechos el principal partido de la oposición deja claro que apuesta por lo último.
Las expectativas de Feijóo se han hecho trizas, y el esperado debate cara a cara ha tenido un claro vencedor, que ha sido el presidente del Gobierno. Es verdad que es él el que cierra el debate y eso le da un plus, pero no es menos cierto que el líder del PP debe aprender que con demagogia y populismo no se resuelven los problemas de los españoles y españolas.