El recurso de Puigdemont ante el TC ahonda las diferencias entre ERC y JxCAT
Los partidos del Govern escenifican de nuevo su falta de unidad
En ERC lo ven como una nueva zancadilla política de su socio en el Govern. En JxCAT como una "cuestión técnica". Lo que nadie niega en privado, sin embargo, es que el recurso de amparo que el expresident de la Generalitat Carles Puigdemont ha presentado ante el Tribunal Constitucional (TC) contra Roger Torrent y la Mesa del Parlament ha vuelto a ilustrar las profundas desavenencias entre los dos partidos que sustentan la Generalitat.
A falta de pocas semanas para que empiece el juicio a los líderes independentistas, ERC y JxCAT siguen librando su batalla particular. "No es que ahora haya división, es que no ha habido unión en toda la legislatura", señalaba este martes un cargo intermedio del Govern. El enésimo ejemplo ha sido el recurso presentado por Puigdemont pidiendo amparo al TC contra la decisión del presidente del Parlament y del resto de la Mesa de no permitirle la delegación de voto.
El día ha estado plagado de explicaciones contradictorias. Mientras los republicanos aseguraban que no tenían conocimiento de la presentación de este recurso, desde JxCAT sostenían que se les trasladó la decisión a principios de enero. La portavoz del Govern, Elsa Artadi (JxCAT), ha tratado de restarle importancia al asunto y ha afirmado este martes que se trata de una "cuestión técnica" para poder acceder al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo. Las explicaciones, sin embargo, no han contentado a los republicanos que creen que no era necesario dar ese paso.
"Si era necesario dar ese paso para llegar a Estrasburgo, ¿por qué Puigdemont es el único que ha presentado este recurso?", se preguntaba este martes un diputado de ERC. La delegación de voto ya abrió una profunda crisis entre ambos partidos el pasado octubre, que muchos coinciden en señalar que se cerró en falso.
"Puigdemont no le tiene mucho cariño a Torrent"
La noticia, avanzada el lunes por la noche por eldiario.es, coincide con una nueva reunión entre el president de la Generalitat, Quim Torra y el vicepresident, Pere Aragonès, este martes en el Palau de la Generalitat. Las fuentes consultadas descartaban cualquier crisis de Gobierno por este nuevo enfrentamiento, pero reconocían que las relaciones están cada vez más tocadas y el mal ambiente en el Parlament durante toda la jornada era innegable.
"Puigdemont no le tiene mucho cariño a Torrent", explicaba el mismo diputado de ERC. En el partido de Junqueras creen que el expresident tiene en su punto de mira al presidente de la Cámara desde que se negó a desobedecer al TC y permitir su investidura a distancia. Creen, además, que desde el espacio posconvergente se intenta señalar y quemar a uno de los pocos líderes visibles que le quedan a ERC, con Junqueras en prisión y Marta Rovira fugada a Suiza. Con todo, en ambos lados intentan rebajar la tensión ante unas semanas determinantes para el secesionismo.
El independentismo carece ahora mismo de una hoja de ruta conjunta para encarar el juicio a sus líderes. Ni ERC, ni JxCAT ni Omnium ni la ANC parecen ir a una y el Govern es también un reflejo de esta descoordinación. Todavía no se ha aprobado ni una sola ley –la legislatura cumplió un año el pasado jueves– e incluso hay división en las consellerías respecto a asuntos clave, como la gestión de la huelga de los taxistas.