El indígena que se ha enfrentado a Almeida por el Amazonas: "Occidente debe dejar de mirarse el ombligo"

Su nombre es Mario Ágreda, es delegado del movimiento indio de América y se ha convertido en el protagonista del día en la Cumbre del Clima en Madrid por enfrentarse al alcalde de la capital.

“Los niños y los jóvenes del futuro tienen que respirar. El Amazonas es más importante que una iglesia. Te lo digo de corazón, es una crítica constructiva”, le ha espetado al alcalde Jose Luis Martinez Almeida en referencia a sus polémicas declaraciones en televisión cuando participaba en un programa con niños de Telemadrid. En el espacio, una de las participantes le preguntó a qué donaría dinero en primer lugar, si a la catedral de Notre Dame, afectada por un grave incendio, o a replantar la selva, y Almeida eligió Notre Dame ante la perplejidad de los críos. “Sí, es el pulmón del mundo, pero la catedral de Notre Dame es el símbolo de Europa y nosotros estamos en Europa”, sentenció.

Este martes, el alcalde –que estaba a punto de dar comienzo a un acto sobre ciudadades sostenibles y resilientes al cambio climático– ha mantenido una conversación con el líder indígena, que le ha entregado además un escrito en defensa de la Amazonia.

Ágreda también se ha referido a la intervención de Sánchez del lunes:“Habla de la Tierra y del medio ambiente, pero no dice nada de Murcia, donde los peces se están muriendo, millones de peces”.

“Un alcalde no debe actuar a nivel individual ni sólo para su colectivo”, ha contado posteriormente en declaraciones a ElHuffPost. “Parte de una concepción judeocristiana occidental y prima sus intereses ideológicos y filosóficos y lo que debería hacer es pensar más para los jóvenes, y para el día de mañana. Hay que luchar por eso, lo otro es secundario, si no no va a seguir durmiendo bien”.

“Los indígenas llevan años luchando por el medio ambiente. También las mujeres y los jóvenes. Esto demuestra una vez más que el mundo occidental es paternalista y que necesita a algo o a alguien para lavar sus culpa. Tiene que dejar de mirarse el ombligo”, ha añadido.