El padre Ángel, fundador de Mensajeros por la Paz, ha celebrado este domingo la llegada de la flota del Aquarius con 630 migrantes al puerto de Valencia. "Es un día precioso, histórico", ha afirmado el prelado, quien ha recordado que la crisis migratoria sigue: "Es cierto que hay un antes y un después, pero siguen llegando otros refugiados a las costas españolas y no están tan bien atendidos".
Tras arribar el primer navío, el italiano Dattilo, el sacerdote se ha mostrado "conmovido, feliz y emocionado", en declaraciones a los periodistas en el muelle 1 del Puerto de Valencia. "Es un día de emociones; nunca hubiera soñado o creído que esto hubiera podido pasar", ha aseverado, y ha descrito como una "gozada" ver llegar a puerto seguro a los primeros migrantes.
El padre Ángel se ha trasladado al Puerto de Valencia: "Hoy es un día precioso e histórico. Es otra explosión social de solidaridad".
De hecho, ha exclamado que se trata de un día "precioso e histórico para todas las ONG". Lo ha relacionado con "aquella primera explosión solidaria que hubo hace dos o tres años, cuando incluso los ayuntamientos decían bienvenidos a los refugiados y las familias daban habitaciones para cada uno de ellos".
Ha destacado además que, en el caso de Valencia, "no hubo hasta la venida del Papa --en su visita a la ciudad en 2006-- tantos medios de comunicación interesados por algo tan importante como la dignidad de estas personas". "La solidaridad tiene que estar presente más días", ha reclamado.
Los tres barcos (Dattilo, Aquarius y Orione) atracados en el puerto de Valencia