El colectivo LGTBI rechaza que Vox use sus derechos como "moneda de cambio" para formar gobiernos

El colectivo LGTBI rechaza que Vox use sus derechos como "moneda de cambio" para formar gobiernos

Denuncian que se han puesto por primera vez en tela de juicio los derechos adquiridos por el movimiento durante la democracia.

EFEEFE

Las exigencias de Vox al PP y Ciudadanos para apoyar los gobiernos autonómicos de Madrid y Murcia han puesto por primera vez en tela de juicio los derechos adquiridos por el movimiento LGTBIQ+ durante la democracia, lo que ha llevado al colectivo a exigir respeto y que no se le use como moneda de cambio.

Coincidiendo con la conmemoración del Día internacional del Orgullo, que se celebra este viernes, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (Felgtb) ha denunciado que “los derechos humanos se hayan convertido en moneda de cambio para conseguir poder político” y ha acusado a los “partido conservadores” de “hacer el juego a la ultraderecha para conseguir espacios de poder”.

Por ello, la Felgtb habilitará una segunda pancarta en la manifestación que recorrerá Madrid el 6 de julio bajo el lema “Ni un paso atrás” y ha animado a los ciudadanos a “sumarse con más fuerza” a la marcha para dejar claro que no se permitirá ningún tipo de retroceso en materia de derechos y libertades.

En el terreno político, la candidata del PP a presidir la Comunidad de Madrid (CAM), Isabel Díaz Ayuso, que está dispuesta a negociar con Vox y con Ciudadanos y que sí ha aceptado revisar las leyes LGTBIQ+ porque quiere evitar “cualquier tipo de desmán, por un lado y por el otro”, ha pedido cautela en las peticiones que afectan al colectivo.

De esta manera se ha referido la política popular a la exigencia de Vox de derogar artículos que, a su juicio, atentan contra “la libertad de los padres a educar a sus hijos”, entre los que se encuentran algunos de la Ley de Identidad y Expresión de Género y la normativa contra la LGTBifobia de la CAM.

Por su parte, el portavoz de Cs en la Asamblea de Madrid, Ignacio Aguado, ha asegurado que “no va a llegar a ningún tipo de acuerdo” con partidos que ataquen al colectivo y que traten de “recortar ni uno solo de sus derechos”, una opinión que comparte la responsable de la formación naranja en Murcia, Isabel Franco.

Ante esta polémica, el Secretario General del PP, Teodoro García Egea, ha instado a Vox a dejar los asuntos de la esfera privada al margen de las negociaciones y ha apostado por seguir en Madrid y Murcia el modelo andaluz.

Esta polémica coincide con los actos de celebración del Orgullo 2019, entre los que destaca el despliegue de la bandera arcoirís en la sede del Ayuntamiento de Madrid, gobernado por PP y Ciudadanos, a pesar de las quejas presentadas por la organización ultra de Hazte Oír y Vox.

Un acto al que la Felgtb ya ha anunciado que no acudirá por la “incoherencia de una Administración” que “por un lado saca la bandera y por otro elimina una parte fundamental de los mensajes reivindicativos de su propia campaña ‘Nuestro mayor orgullo’, al retirar los mensajes referentes a “quienes guardan recuerdo de la represión”.

Además, la Felgtb y la COGAM (el colectivo gay de Madrid) han excluido al Partido Popular y a Ciudadanos de tener representación oficial en la manifestación de Madrid y, por tanto, no llevarán carroza a diferencia de otros partidos como PSOE y Podemos.

Basan su decisión en su firme intención de “frenar a la ultraderecha”, al igual que han hecho las entidades que organizan el Pride Barcelona, que no permitirán a Cs participar como partido en la manifestación del próximo sábado por sus pactos con formaciones que fomentan “el discurso del odio”.

Por otra parte, la concesión del premio de la Asociación Española de Transexuales (Transexualia) al portavoz de Cs en Madrid, Ignacio Aguado, por “su defensa de los derechos LGTBI”, ha sido muy criticada por representantes del colectivo, como la Felgtb, que la ha calificado de “hipócrita”.

La diputada del PSOE en la Comunidad de Madrid, Carla Antonelli, muy comprometida con el colectivo por su condición de mujer trans, cree que “ni se entiende ni se comprende” cuando la formación naranja “se ha desnudado políticamente y está pactando con Vox en toda España”.