El 2022, fecha de caducidad para Sánchez e Iglesias

La estrategia de Podemos de ser a la vez Gobierno y oposición tiene fecha de caducidad, 2022. En medio de este jolgorio de mociones de censura y elecciones anticipadas que se ha desatado este miércoles, la duración de este conflicto permanente adquiere aún más valor.

Para el año que viene, repartidos los fondos europeos y vacunada la mayoría de la población, los socialistas podrán rentabilizar su gestión para convocar elecciones generales. Lo sabe claramente el vicepresidente Pablo Iglesias, como el resto de los partidos que apoyan al Gobierno, conscientes de que no tienen otra salida. La jugada previsible sería que el PSOE obtendría más votos y a nacionalistas y resto de la izquierda no le quedaría más remedio que seguir alineados, ante el derrumbe de Pablo Casado y el auge de Vox.

“La cifra del 2022 es muy lógica porque ahora mismo nosotros no tenemos nada que ganar —argumenta una ministra de Sánchez—. Sin embargo, una vez vacunada la población y repartidos los fondos europeos puede haber una oportunidad para convocar elecciones. La actual situación es perfecta para Podemos. Para el PSOE la oposición de Iglesias supone un desgaste ante la opinión pública, muy afectada ya por la fatiga pandémica, los datos del paro y el retraso de las vacunas”.

El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, prefiere no entrar al trapo, pero ya dice bastante cuando a la pregunta de ¿hasta cuándo puede durar una estrategia de ser gobierno y oposición a la vez, con el desgaste que supone? señala: “Pregúnteles a ellos. Se puede aguantar hasta que uno quiera”.

Admitimos la sugerencia y trasladamos la duda a la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, la ministra de Unidas Podemos con más peso en el Gobierno. “No estoy en eso, estoy trabajando a tope en lo importante” responde, escaqueándose de las polémicas diarias entre sus compañeros de consejo de ministros.

Mientras hablamos de la fecha de caducidad para la coalición de Gobierno, otras coaliciones autonómicas y municipales amenazan con saltar por los aires, copando los corrillos y las conversaciones en el patio del Congreso de los Diputados, agitado tras la moción presentada este miércoles por PSOE y Ciudadanos en Murcia y el anuncio de Isabel Díaz Ayuso de adelantar las elecciones en Madrid para evitar su desalojo de la presidencia.

En este contexto, Pedro Quevedo, el portavoz de Nueva Canarias —partido que sostiene al Gobierno socialista en Canarias— recuerda que la política de pactos de Gobiernos en la actualidad es algo nuevo que se lleva como se puede.

“Lo que ocurre en el Gobierno de España está ocurriendo en las coaliciones territoriales. Otra cosa es en qué asuntos pones énfasis para disentir. Cuestiones como la Casa Real o la Ley Trans tienen menos coste y dejan mantener el tipo al socio minoritario, mientras que las de mayor calado económico y social, como los precios del alquiler y el reparto de fondos, conllevan una mayor conflicto. Apuesto que este Gobierno no irá más allá de mediados del 2022. Ya hay unos presupuestos del Estado, en los que se han corregido contradicciones, y ahora vienen las políticas europeas, con las que Sánchez puede vender un papel positivo” apunta Quevedo.

La situación de conflicto permanente que se traslada desde el Gobierno a la ciudadanía preocupa mucho a los ministros socialistas que temen el ascenso de Vox a costa del PP. “Es una situación maquiavélica. Hacer oposición aprovechando el foco de estar en el Gobierno, con una repercusión mayor de la que tendrías si no formaras parte de él. Toda esta bronca hace que Vox suba. Los ganadores son Podemos y Vox”, apunta otro ministro socialista.

En círculos de Moncloa se maneja el panorama de que sea Iglesias quien rompa la coalición cuando se acerque la fecha de las elecciones generales, para poder vender a sus votantes que no hay quien pueda seguir participando del Ejecutivo de Sánchez.

Es también este panorama es lo que hace los apoyos de partidos autonómicos, como en Valencia, sepan que están condenados a seguir sosteniendo a los socialistas. Es el caso de Joan Baldoví, diputado y portavoz de Compromís, socio de gobierno de Ximo Puig en Valencia.  “La estrategia de ser Gobierno y oposición durará hasta algún momento de 2022, porque para entonces estarán hechos los trámites de los fondos europeos y vacunada la población. Nosotros —partidos de izquierdas y nacionalistas— tenemos pocas opciones, porque ¿qué hay enfrente?. Esto es política, lo mismo que te estoy diciendo ahora ha volado dentro de tres meses”.

No le falta razón a Baldoví. Mientras hablamos, los líderes de los partidos se van sucediendo ante el micrófono para responder a la última jugada de Ayuso, convocar elecciones anticipadas en Madrid. Las elecciones generales a mitad del 2022 son una posibilidad muy verosímil y en ellas va a influir lo que pase entre las fuerzas de la derecha que se están peleando por hacerse con un mismo votante.