Los 90 minutos que la FIFA nunca quiso vivir: el negocio del Mundial de Qatar desmontado en dos documentales
Una producción internacional de Netflix y un ambicioso proyecto del medio español 'La media inglesa' retratan los negocios de la FIFA y sus responsables con el Mundial como moneda.
Bribe upon bribe, upon bribe how Fifa and its cronies carved up football (Soborno tras soborno tras soborno, cómo la FIFA y sus compinches se repartieron el fútbol). No cabe mejor arranque que el célebre titular de The Guardian para sacar a la luz buena parte de las pantanosas aguas del máximo organismo futbolístico mundial.
A horas de que arranque Qatar 2022, el Mundial más polémico entre incontables escándalos humanitarios, diplomáticos y financieros, a la FIFA se le multiplican los problemas. Dos trabajos de investigación, Los Entresijos de la FIFA (Netflix) a nivel global y Qatar, el mundial a sus pies: todos los hombres de la FIFA (La Media Inglesa) como producción española, que, solamente en sus primeras entregas de los seriales anunciados, revelan al detalle el funcionamiento de una “organización criminal” y la más que cuestionable concesión de Mundiales.
Porque, como sentencia el documental español, “24 hombres decidiendo en completo secreto el destino del Mundial... nadie podría imaginarse que algo saldría mal”, con el toque irónico que les caracteriza. El escándalo fue tal que hasta el FBI intervino, deteniendo a varios altos cargos en la operación conocida como FIFAgate en 2015.
Un acercamiento a cómo el todopoderoso organismo futbolístico mueve dinero, influencias y poder a su antojo con la excusa del deporte. El fenómeno llamado sportwashing, ligado a otro término, el soft power, o la demostración de poder internacional de regímenes a través de actividades no bélicas ni agresivas. Pero esa utilización del deporte como excusa esgrimida para darle el Mundial a un país que incumple derechos humanos básicos no es nueva hoy en la FIFA; ya se utilizó para que la Argentina de la dictadura de Videla celebrase su edición de 1978.
Curiosidades de la técnica, ambos documentales suman 90 minutos, el peor ‘partido’ que deja retratado a la cada día más cuestionada FIFA.
A estas alturas no sorprenderá a nadie pero... alerta spoilers
El documental de Netflix
Bajo la dirección de Daniel Gordon, celebre por diversos trabajos sobre temática deportiva, este documental de unos 56 minutos se adentra en la evolución de la FIFA desde una organización endogámica y puramente futbolística al proyecto faraónico y multiclientelar desarrollado a partir de la presidencia del brasileño Joao Havelange (1974-1998).
Pero es con su mano derecha y posterior verdugo en la sombra, el suizo Joseph ‘Sepp’ Blatter (1998-2015, cuando fue suspendido del cargo), con quien se dispara el escándalo, coronado con la ilegal concesión del Mundial a Qatar 2022.
Menos de una hora en la primera entrega para repasar, a golpe de escándalo, los últimos 40 años de una organización que “se volvió tóxica”, como define su actual responsable, Gianni Infantino y repasada a través de una sucesión de testimonios y fuentes internas tanto de la FIFA como de los responsables de investigaciones jurídicas y periodísticas.
Estas son 10 de las mejores frases que deja el primer capítulo de Netflix:
“Mi nombre siempre será corrupción, corrupción, corrupción” (Joseph Blatter, presidente de la FIFA entre 1998 y 2015).
“La FIFA se volvió tóxica, se volvió una organización criminal” (Gianni Infantino, presidente actual de la FIFA).
“Blatter era ‘El Padrino’ del fútbol y tenía la sensación de que era intocable” (Amanda Davies, presentadora de deportes de la CNN).
“Es el escándalo deportivo más grande que se haya cometido” (fuente interna del documental).
“Si el Departamento de Justicia de EEUU nombra a la FIFA como organización criminal es juego, set y partido” (Bill Burck, abogado de la FIFA).
“Es el Mundial del fraude y hoy le sacamos tarjeta roja a la FIFA” (Richard Weber, director de Investigaciones Criminales de IRS, al presentar la operación de investigación y detenciones en la FIFA).
“No me di cuenta del poder qué tenían, no sabía que controlaban los gobiernos y los bancos” (Mary Lynn Blanks, expareja de un Ejecutivo de la FIFA).
“Muchos países africanos cambiaron de candidato en 1998 (de Johansson para irse con Blatter) antes del Congreso de la FIFA y se habla de entrega de dinero en las habitaciones del hotel. Y era verdad, era verdad” (Gerhard Aigner, ex secretario general de la UEFA).
“Si Johansson sale elegido ese día, los escándalos de la FIFA que hemos conocido nunca hubieran ocurrido. Todo comenzó con Blatter y Havelange y las elecciones del 98 fueron el inicio de lo que vendría después” (Gerhard Aigner).
“Blatter no hizo nada para intentar parar este ‘tren de mercancías’” (Jerome Valkce, ex número dos de la FIFA).
La primera entrega del serial sobre Qatar de La Media Inglesa
En un ambicioso proyecto, cargado de testimonios de protagonistas y análisis propio, con un estilo narrativo diferente, el medio especializado en el fútbol inglés da un paso más en su estrategia.
El serial sobre Qatar 2022, disponible en su canal de Youtube, donde cuentan con más de 350.000 suscriptores, se adentra, en diferentes entregas, en los pormenores de la concesión y día a día del proyecto mundialista.
Estas son 10 de las grandes confesiones de Qatar, el mundial a sus pies:
“Cuanto más hablaba de cómo hacía las cosas la FIFA, más me complicaban la vida. Empezaron a espiarme, me hackearon, crearon redes y webs falsas con mi nombre en una estrategia orquestada desde la sede (Bonita Mersiades, directora de Comunicación de la candidatura de Australia para 2018 y 2022).
“Tras la votación final sobre Qatar, esa tarde de 2010, el nº2 de la FIFA, Jerome Valkce dice ‘la FIFA está muerta, esto ha acabado con la FIFA’” (Declan Hill, periodista de investigación y profesor universitario).
“Un documento oficial interno de la FIFA decía que 2018 y 2022 se celebrarían en tal fecha INAMOVIBLE y después me encuentro que Qatar es en noviembre. ¿No era inamovible? ¿Y se callaron las demás candidaturas? (Miguel Ángel López, director general de la candidatura España-Portugal para 2018).
“La FIFA hizo una broma de investigación con el Informe García sobre corrupción; investigaron a todos menos a Rusia y Qatar, los ganadores, y el responsable de la investigación simplemente se creyó las excusas de estos países, que eran como la broma de ‘el perro se ha comido mis deberes’ (Declan Hill).
“La FIFA tenía unos ‘cortesanos’ que debían descubrir qué querían sus VIP a cambio de votar por Rusia, Qatar, Australia o quien fuera (Bonita Mersiades)..
“Qatar tenía un pacto con Rusia y otro con la candidatura española para repartirse los votos de 2018 y 2022... esto favorecía a Catar y a Rusia, pero no a España” (Nick Harris, periodista de investigación).
“En todas las elecciones se habla. Una cosa es hablar y otra es comprar votos... y nosotros hablamos, me consta que hablamos con Qatar” (Miguel Ángel López, en respuesta a Harris).
“Cuando oímos que el Departamento de Justicia de EEUU iba a intervenir en la FIFA pensábamos que era una broma pero no... fue como el asesinato de Kennedy para mi generación, todos recordaremos siempre donde estábamos ese día” (Declan Hill).
“Jack Warner, vicepresidente de la FIFA, cobró dinero de Qatar... y sus hijos también y se dieron bolsas con dinero en Nueva York” (Miguel Ángel López).
“Cuando me vi con el Comité Ejecutivo sabía que no nos votarían por sus sonrisas y sus palabras. Blatter nos dijo que “siempre” había que buscar un país que pudiera subir un 4% su PIB y ahí entendí que se acabó todo” (Miguel Ángel López).