Casado no dimite y convoca la Junta Directiva Nacional con la vista en un congreso
Decisión tras el Comité de Dirección en un día frenético con los barones presionando para que se marche.
Objetivo: ganar tiempo en la mayor guerra que ha vivido el PP. El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, va a convocar para la semana que viene la Junta Directiva Nacional, máximo órgano entre congresos del partido, según fuentes populares.
Así se ha decidido en el Comité de Dirección del Partido Popular “por unanimidad”, añaden las fuentes, tras estar reunido desde las once de la mañana hasta casi las ocho de la tarde.
¿Por qué es tan importante la Junta Directiva? Es el órgano en el que se tiene que decidir si hay un congreso extraordinario o no. Para ello, sería necesario que lo apoyasen dos tercios de la cúpula del partido (formada por más de 400 miembros). Según la Cadena Ser, en esa cita el propio Casado podría convocar el congreso (que toca en el mes de julio).
Esta es la decisión que ha tomado Casado, que sigue aferrado a la silla, después de un lunes de locos en el Partido Popular, en el que los barones, especialmente Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso, han presionado públicamente para que se tomen medidas urgentes ante el “colapso” y la situación “insostenible” del partido. Es decir, esperaban que el líder dimitiese.
Pero Casado no ha tomado esa decisión después de estar horas reunido con su núcleo duro en Génova 13. Allí ha escuchado a los miembros del Comité de Dirección y ha llamado también a diputados y cargos afines para medir sus apoyos. La decisión de que la Junta sea un lunes ha provocado el malestar de Juanma Moreno, al ser el Día de Andalucía, por lo que podría cambiarse la fecha prevista inicialmente.
No ha sido tampoco una balsa de aceite el Comité de Dirección. De hecho, ha habido ciertos momentos de tensión, ya que algunos miembros cercanos han mostrado visiones diferentes a la hora de resolver la crisis, como Andrea Levy, Elvira Rodríguez y Ana Pastor.
Pero, finalmente, se ha tomado por unanimidad esa decisión de convocar una reunión trascendental para el próximo lunes. Allí ya se tendría que votar y exigir cara a cara un congreso extraordinario. A lo largo del día los dos bandos han estado llamando a cargos de toda España para testar los apoyos y saber si conseguirían los dos tercios. Casado y los suyos creen que los números les dan en estos momentos.
Supone ir a una lucha directa y con nombres. A pesar de que Casado intentó rebajar la guerra durante el fin de semana claudicando ante Ayuso cerrándole el expediente, no se consiguió cerrar la crisis. De hecho, según fuentes consultadas, los barones estuvieron hablando entre ellos a lo largo del fin de semana y consideraron que ya no les valía Pablo Casado. La voz cantante la ha llevado el gallego Feijóo, en contacto permanente con Díaz Ayuso.
La acción estaba coordinada para el lunes. Díaz Ayuso era la primera en disparar en un acto en Boadilla, volviendo a presentarse como la víctima del espionaje y llamando a dar un “giro absoluto” al partido: “La situación es insostenible”. Y cerraba la posibilidad de presentarse en un congreso extraordinario, señalando que su sitio está en Madrid.
A los pocos minutos llegaba la otra bomba: Feijóo subía el tono en Galicia. Una petición muy directa: “Medias urgentes, que no serán fáciles”. Los dos habían hablado durante el fin de semana, pero no lograron un acuerdo. Las palabras del gallego venían a pedir un congreso extraordinario y la salida de Casado, ya no le valía la cabeza de Teodoro García Egea. Y otro dardo directo: le llamaba a tomar la solución final.
A lo largo de este lunes han salido más barones a pedir que voten los afiliados (es decir, que haya congreso y Casado se vaya). En este lado se han situado territorios como Asturias y Cataluña. Todos pendientes de Andalucía: Moreno Bonilla no ha ido tan a saco como Feijóo y ha pedido “diálogo” con la dirección nacional para una solución “lo antes posible”.
La respuesta de Casado es que no va a ser él el que se corte la cabeza y que los que quieran asaltar Génova se tendrá que manchar la manos de sangre ganando en la Junta Directiva Nacional. A pesar de la presión de los barones, da la señal de que va a luchar y va a buscar los apoyos durante esta semana. ¿Y en qué confía? Pues en los niveles por debajo de los barones: los cargos provinciales pueden ser clave.
Otro de los titulares del día es que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha dejado tirado al propio Pablo Casado y ni siquiera ha ido al Comité de Dirección del partido. Fuentes del Ayuntamiento han señalado que estaba preparando un pleno municipal “muy importante”.