Bustinduy renuncia a ser el candidato de Podemos a las europeas
María Eugenia Rodrígez Palop será la 'número uno' para el 26-M
El ‘errejonista’ Pablo Bustinduy ha comunicado su intención de dejar la primera línea de la política institucional y no ser el candidato de Podemos en las elecciones europeas, según ha informado la formación morada.
“Desde el respeto a las razones personales que ha explicado, le damos las gracias por su trabajo, generosidad y compromiso”, ha indicado el partido de Pablo Iglesias.
Podemos ha avanzado que Bustinduy seguirá trabajando “con la candidatura” y al frente de la Secretaría Internacional. En su lugar, María Eugenia Rodríguez Palop, profesora universitaria y “referente del feminismo”, será la cabeza de lista a las europeas tras la renuncia de Bustinduy.
“Una decisión personal”
El propio Bustinduy ha explicado en Facebook su postura: “Tras darle muchas, muchas vueltas, he decidido no seguir en este nuevo ciclo en la primera línea de la política institucional. Ha sido una decisión muy difícil, pues lo último que querría es defraudar la confianza de quienes me avalaron para presentarme a las próximas elecciones europeas”.
Pero, agrega, también cree “que lo más honesto y constructivo en política es decir la verdad”. “Siendo muy sincero conmigo mismo, no creo tener hoy la entereza y las fuerzas necesarias para asumir una responsabilidad pública tan importante con el rigor, la dedicación y el compromiso absoluto a largo plazo que requiere en este tiempo político nuevo”, añade en el post.
“Es una decisión personal, de mi entera responsabilidad y, como digo, muy difícil, pero no tengo dudas de que dar el relevo es una decisión virtuosa. La candidatura europea va a quedar en las mejores manos imaginables”, argumenta el ‘morado’, que da su apoyo a la nueva aspirante: “Es un motivo de entusiasmo contar con ella para esa tarea, y le brindaré en los próximos meses todo mi apoyo”.
Según Bustinduy, “el trabajo político es una labor hermosa, digna y gratificante, que honra a quien la ejerce con probidad y enseña a apreciar lo que es común por encima de cualquier otra cosa”. “También es un mundo complejo, duro, a veces descarnado. Con lo bueno y con lo malo, no tengo dudas de que merece la pena”, reflexiona.
En este sentido, se confiesa: “A lo largo de este trayecto he cometido también muchos errores, y sé que necesitaré tiempo para entenderlos y aprender de ellos”. “Con todo, he intentado cumplir siempre con mis responsabilidades con seriedad, rigor y esfuerzo. Lo he hecho lo mejor que he sabido, y estoy seguro de que quienes me suceden lo harán también, lo harán mejor, y con más fuerza”, indica Bustinduy.
Y escribe en tono personal: “Por encima de todo, pienso en este momento en quienes ya no están, y especialmente en mi padre, que se fue poco después de mi entrada en el Congreso pero me ha acompañado cada día, en cada paso y cada palabra, con su aliento incondicional, con su ejemplo y su enseñanza de que siempre, siempre, siempre, todo se puede hacer mejor”.
“De corazón, muchas gracias”, se despide.