Bono, sobre el chat de exmilitares: "A la procesión de cualquier santo de mi pueblo va más gente"
El exministro de Defensa quita hierro a la polémica pero, aún así, llama “grupo de trastornados o de fascistas” a los participantes.
El exministro de Defensa por el PSOE, José Bono, ha restado importancia esta mañana al chat en el que militares ya retirados defienden fusilamientos y golpes de estado para poner a España como a ellos les gusta.
En una entrevista en La Hora de la 1, ha dicho que “es una exageración convertir en noticia tan importante y darle tan brío a a una noticia que, sí, tiene su importancia, pero es una importancia muy pequeña”. Ha recurrido a su experiencia más cercana para comparar: “Mire, yo soy de un pueblecito de la provincia de Albacete (Salobre), que tiene menos de 500 habitantes y a la procesión de cualquier santo de mi pueblo va más gente de los que firman esas cartas o están en estos chats”.
Sin embargo, ha sido duro al calificar el chat de “grupo de trastornados o de fascistas”, que daña la imagen de las Fuerzas Armadas. Pero “trastornados hay entre periodistas, albañiles notarios y también militares”, matiza. “Cuando los militares pasan al retiro o la reserva y dejan de tener un comportamiento leal con su país [...] llegan al deshonor y no son militares”, ha señalado el exministro.
Bono recuerda que tuvo que tratar con el general Fernández, capitán general de Melilla, y cesarlo precisamente por caer en esta nostalgia predemocrática: “Le cese porque tenía en la oficina un retrato del General Franco de proporciones similares al del Jefe del Estado, del Rey”.
Bono también se ha referido a las críticas del expresidente Felipe González por el apoyo de Bildu a los Presupuestos. “Me parece razonable lo que dice Felipe González en el sentido en el que a los socialistas no nos gusta pactar con Bildu. Sentarme en la misma mesa con los que hace dos días han defendido el crimen y el asesinato no me gusta”, sostiene.
Reconoce, también, que le “hubiera gustado más” sacar adelante las cuentas con el voto de Ciudadanos. “A mí me encantaría que aprobados los Presupuestos, Bildu no sea alguien a quien llamemos a la gobernabilidad”, lanza. También reconoce que “el rumbo que ha tomado el presidente era obligado, pero matiza, de nuevo que “la compañía” a él “no le gusta nada”.