Ángela Molina: “Quizás la vida se parezca al cine, no se disfruta sin los demás”
La actriz ha recibido el Goya de Honor con un discurso cargado de sensibilidad.
La actriz Ángela Molina ha recibido este sábado el Goya de Honor “con amor”, porque es “la mejor manera” que conoce “de dar gracias por todo”.
“Solo porque he recibido tanto de la vida encuentro esta noche el valor para dirigirme a vosotros”, ha afirmado Ángela Molina, que ha recibido el premio de manos del cineasta Jaime Chávarri y ha entrado al son de la coreografía y abanicos del Ballet ESAEM y con las caras de todos los nominados en la pantalla gigante.
Ha dedicado el reconocimiento a sus padres, porque cuando habla de ellos le “invade una ola de amor” con la que le “late el corazón” y le “devuelve la vida”, y ha resaltado que este Goya es también de toda su “familia adorada”.
La “generosidad” de la Academia” le ha otorgado un Goya que recibe “llena de agradecimiento, con alegría y serenidad si cabe” y con la alegría de que hayan sido los compañeros de profesión quienes se han “acordado” de ella.
“Hemos estado juntos lo suficiente para vivir esta noche y volverlo a estar, improvisando puentes que ninguna pandemia puede arrebatarnos”, ha aseverado.
“Solo será mío este Goya si lo es también de todas y cada una de las personas con las que he trabajado, seres humanos de todos los oficios del cine que me han acompañado”.
Ha recordado emocionada que “hace algún tiempo” su padre, el malagueño Antonio Molina, cantó en el mismo escenario donde se entregaban los Goya.
“No imaginaba él aquel día que su hija recibiría en este mismo escenario el cariño del público”, ha dicho la actriz, que ha añadido que recibir el premio en la tierra de su padre le hace “sospechar que el azar es cómplice del amor”.
Molina ha terminado su discurso, cargado de sensibilidad, con una reflexión: “Quizás la vida se parezca al cine, no se disfruta sin los demás”.