¡A los leones!

Sus señorías están ya preparadas. Este martes se celebrarán las sesiones constitutivas del Congreso y del Senado, marcadas por la nueva mayoría progresista, a la espera del nuevo Gobierno que pacte Pedro Sánchez y con la entrada por primera vez de la ultra derecha en las Cortes democráticas.

Todo esto en plena efervescencia electoral a menos de una semana del 26-M y con políticos presos jurando su cargo. ¡Que no nos falte de nada! ¡A los leones!

En apenas tres años hemos visto configurar tres veces un nuevo Parlamento en nuestro país. Un tiempo en el que se enterró definitivamente el bipartidismo y en el que los españoles perdieron la virginidad política en muchas cosas: escaños de Ciudadanos y Podemos, repetición electoral, la abstención del PSOE a favor del PP, una moción de censura y un presidente del Gobierno que no era ni diputado.

Pero que no se pierdan las nuevas-viejas costumbres, esta España hiperpolitizada empieza una legislatura con muchas emociones. Los jefes de las Cortes serán previsiblemente dos catalanes socialistas: Pedro Sánchez ha propuesto para estas votaciones a la hasta ahora ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, como presidenta del Congreso y al filósofo Manuel Cruz para el Senado.

Con estas designaciones, el presidente del Gobierno manda un mensaje muy claro. Por un lado, la relevancia del PSC en la arquitectura del Estado y, además, un señal al independentismo, que ha vetado la posibilidad de que fuera el líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, el que ocupara el puesto en la Cámara Alta. Dos personas que encarnan el espíritu dentro del socialismo de una reforma federal de la Constitución, pero con un discurso en contra de la independencia catalana.

Y una de las fotos de estos días será la del traslado de los políticos presos a las Cámaras para que presenten credenciales y prometer su cargo. Este lunes irán desde Soto del Real al Congreso Oriol Junqueras, Jordi Turull, Jordi Sànchez y Josep Rull, y Raül Romeva al Senado para culminar los trámites previos. Y el Supremo les ha permitido también acudir al Pleno del martes, aunque ha denegado su petición de libertad y de paralizar el juicio del procés.

A esta sesión constitutiva llegarán en un furgón de la Guardia Civil y luego serán custodiados por policías (aunque los agentes no podrán estar dentro del Hemiciclo). En el pleno podrán hablar con quien quieran, pero no fuera ni atender a la prensa.

Después de esta sesión, en la Mesa del Congreso se deberá estudiar más adelante la suspensión de los presos. Tendrá que ser previsiblemente este órgano el que adopte la decisión aplicando el artículo 21 de su reglamento -al darse las condiciones de prisión preventiva y un auto de procesamiento en firme-. Pero se puede producir otro culebrón jurídico-político al no haberse pedido el suplicatorio por parte del Alto Tribunal.

Mirando a la investidura

Estas Cortes Generales que se inician el martes tendrán como primera gran misión la investidura del presidente del Gobierno. En el Gobierno dan por hecho que lograrán la mayoría para que Sánchez siga en La Moncloa, aunque se prevé que esta sesión no se celebre hasta finales de junio o principios de julio.

Desde que se celebraran las elecciones del 28-A, desde el PSOE no han querido dar muchas pistas sobre alianzas posteriores para no interferir en la campaña del ‘superdomingo’ (europeas, municipales y autonómicas). En un primer momento todas las voces apuntaban en público a una fórmula ‘a la portuguesa’: un Gobierno monocolor socialista pero con un acuerdo programático y desde el Parlamento con Podemos. No obstante, hay miembros de la cúpula socialista en privado que sopesan la posibilidad de dar algunos cargos a los de Pablo Iglesias para compartir un posterior desgaste si las cosas no van bien.

Los últimos movimientos en el Gobierno y en Ferraz es presionar públicamente al Partido Popular y a Ciudadanos para que se abstengan en la futura sesión de investidura y no tener que depender de los soberanistas.

En este arranque de legislatura se verá ya el entendimiento de PSOE y Podemos, que han pactado el reparto de puestos de la Mesa del Congreso -habrá tres sitios para socialistas, dos para ‘morados’, dos para PP y dos para Cs-. El hecho de que Gloria Elizo (Podemos) ocupe la Vicepresidencia primera conlleva que la tengan que votar también algunos diputados socialistas.

Escenario del duelo PP vs. Ciudadanos

Los socialistas viven unos días de miel y de entusiasmo. Mientras que en las bancadas de la derecha se preparan para un combate de gran calado con el escenario del Congreso: ¿quién va a liderar la oposición? Un hundido Pablo Casado se enfrentará con sus mensajes a un crecido Albert Rivera, que acaricia el sorpasso a los populares y aspira a ser el referente del centro derecha. Y junto a él, se espera con mucha fuerza a Inés Arrimadas.

Los populares ven mermada su representación y, además, en los últimos días han visto cómo se han caído, por obra y gracia de la calle Génova, algunos de los que se suponían que serían sus referentes en la Cámara Baja: Andrea Levy y Daniel Lacalle. Todo en pleno giro del partido para intentar volver al centro tras el batacazo electoral -el peor resultado de la historia del PP-. Están llamados a jugar un nuevo papel en el Congreso Cuca Gamarra, Marta González y Pablo Montesinos.

Y las Cortes españolas dejarán de ser ese oasis europeo -junto a Portugal- en el que no se escuchaban las voces racistas, homófobas y machistas de la ultra derecha. A pesar de no cumplir sus expectativas, hasta 24 diputados, liderados por Santiago Abascal, se sentarán en el Congreso. Desde el franquismo, no se había visto en los asientos de la Carrera de San Jerónimo a una fuerza extrema. Con su plana mayor acompañando a su líder: Javier Ortega Smith, Iván Espinosa de los Monteros y Manuel Mariscal. Y el primer ‘show’ puede llegar en el momento de jurar el cargo si utilizan como sus compañeros hace unos días en las Cortes valencianas la coletilla de “por Dios y por España”.

Pero en este Congreso también entrará muy fuerte el aire del 8-M: será la legislatura con más diputadas de nuestra historia. En total, habrá 184 hombres y 166 mujeres, lo que supone una presencia femenina del 47,4%. Y España ostentará un récord en Europa: el Parlamento con más mujeres de todo el continente, por encima de Suecia, Finlandia y Noruega.

Un Congreso de los Diputados que también marcará otro número histórico: habrá cuatro señorías de etnia gitana, algo que no había pasado hasta este momento. Allí se sentarán Juan José Cortés (PP), Sara Giménez (Ciudadanos), Ismael Cortés (En Comú) y Beatriz Micaela Carrillo de los Reyes (PSOE).

Sus señorías vuelven al trabajo este martes. ¡A los leones!