5 claves para no estar y/o sentirte solo
¿Te sientes en soledad? Sería bueno que puedas diferenciar entre la soledad, de estar solo, y el sentimiento de soledad que sería que, aunque estés con gente, sientas que estas solo. En este segundo caso estaríamos hablando de soledad emocional. También es la suma de ambas cosas, estas solo y te sientes solo, tienes la firme convicción de que no le interesas a nadie.
Las personas somos sociales por naturaleza, tenemos la gran necesidad de interactuar unos con otros. Hemos sido capaces de sobrevivir y desarrollarnos como especie porque hemos colaborado entre nosotros. Una persona que estaba sola, que no estaba con la tribu, tenía muy complicada la supervivencia frente a la que permanecía con los demás. Aún hoy esto es así, la persona que está aislada, sola, tenderá a sentirse peor, enfermar e incluso reduce su esperanza de vida.
Te voy a dar cinco claves para mejor superar la soledad:
1. Acepta tus emociones y pensamientos, no luches contra ellos
Si te sientes solo, seguro que tienes y le das mucho valor a pensamientos como "no tengo amigos", "no puedo contar con nadie" o "no soy importante para nadie". Esto hace que te sientas muy mal, porque fusionas lo que piensa con lo que sientes. La solución sería no dar importancia a estos pensamientos, son solo eso, pensamientos: no hay que hacer juicios de valor, ni luchar contra ellos cuando vuelvan a tu mente.
Desde la psicología sabemos que cuanto más te resistes a un pensamiento, más fuerte se hace. Es como intentar no pensar en un elefante azul: irremediablemente terminas pensando en ese elefante azul.
Trata de aceptar estos pensamientos y emociones de soledad. Expresa lo que sientes: "Cuando pienso que no tengo pareja, amigos,...etc., me hace sentir que estoy solo". Y ya está. Te recomendaría incluso que trates a estos pensamientos como si fuera un amigo un poco pesado que te está haciendo una visita sin avisar. "Hola pensamiento de soledad, veo que has vuelto a visitarme" y trata de acogerlo con aceptación, hasta que se vaya. Como un nubarrón negro que según viene se va.
2. Conecta con gente
Resulta vital para nuestro bienestar el propiciar interacciones con personas en la vida real y no quedarse únicamente con el mundo online. Podemos interactuar, aunque sea con el cajero del supermercado, el portero, el taxista, y no necesariamente tienen que ser conversaciones largas y/o profundas que puedan resultar incómodas. Interacciones sobre temas de actualidad, el tiempo, etc. Conversaciones intrascendentes pero que nos hacen tener contacto con los demás.
3. Sé generoso y haz algo por los demás
Una de las mejores maneras de aliviar el sentimiento negativo de la soledad es dejar de pensar en ella. Es hacer algo generoso por los demás. Por ello puedes unirte a una ONG y dedicar parte de tu tiempo por ejemplo, a hacerle compañía a una persona anciana; resulta incompatible el sentirse solo cuando estás ayudando a otra persona que lo necesita. Ayudando te ayudas.
4. No tiene por qué ser algo negativo
Aprende a convivir serenamente con la soledad, ten en cuenta que es normal y natural que de vez en cuando te sientas solo. A todos nos puede ocurrir.
No te quedes aislado en casa, sal, haz deporte, crea hábitos saludables y trata de conectar con gente nueva. Invierte en experiencias, no en cosas. De este modo verás que tu sentimiento de soledad es tan importante como tú quieres que sea.
5. Ten una mascota
Te obliga a tener una responsabilidad y una rutina. Ya no puedes quedarte encerrado en tu habitación, tienes que salir a la calle y darle de comer.
Si te decides a tener un perro, por ejemplo, te ayudará a conocer a otras personas. Los dueños de perros inician muchas más conversaciones entre ellos, (Rogers, Hart & Boltz, 1993). La causa es que tener algo en común con otras personas nos vincula más a ellas y nos facilita relacionarnos con ellas. Así que puede ser una buena oportunidad para conocer gente cuando sacas a pasear tu mascota.
Tu mascota además puede mejorar tu estado ánimo. Acariciar a tu perro durante 20 minutos es suficiente para aumentar en un 10% tus niveles de serotonina, conocida como la hormona de la felicidad (Beetz et al. 2012).