4 maneras (que funcionan) de apasionarte por el mundo del vino
Yo no sé de vinos...
Mi olfato no da para más...
Nunca voy a ser capaz de apreciar un vino...
Estas son algunas de las frases que más repiten mis amigos o conocidos cuando se enteran de que me apasiona este mundo.
Estoy convencido de que es en parte por falta de un conocimiento básico y en parte por el "engolamiento" de los expertos y expertillos, que de todo hay en este mundo apasionante.
Pero, ¿qué te parece si hablamos unos minutos sobre este tema? ¿Te gustaría saber de vinos?
Imagínate que pudieras apreciar un vino de forma sencilla, profundizar hasta donde te apetezca y realmente disfrutar de los buenos vinos. Descubrir sabores y olores nuevos que te harán pasar muy buenos momentos. Incluso puede que descubras la característica común a los vinos de calidad.
Imagínate que todo eso te puede pasar a ti, siguiendo unos métodos al alcance de cualquiera, siempre que no tenga un impedimento físico grave (menos del 2% de la población).
¡Deja de imaginar! Acompáñame y te lo muestro.
LA TIENDA DE CONFIANZA
El primero de los métodos requiere que encuentres una tienda de confianza. En casi todas las ciudades medianas hay alguna. Si vives en un pueblo, tampoco es un problema, se puede suplir por una tienda online.
Las características que debe tener esa tienda
No te sirve cualquiera. Pero no te preocupes, te voy a decir las características que debe tener. No son muy difíciles de encontrar.
La primera es que sea una tienda mediana. Si vives en Madrid, aquí tienes algunas que te podrían servir:
Cinco de las mejores tiendas de vino en Madrid
Las pequeñas no nos sirven porque el porfolio que tienen es demasiado pequeño y no se puede variar demasiado. A no ser que roten productos con mucha frecuencia.
Las tiendas grandes tienen el problema de que es difícil que coincidas con el mismo tendero cuando vayas. Si no te va conociendo a ti y a tus gustos, como verás, no sirve para poder practicar el método de la tienda de confianza. Ahora lo vemos.
La segunda característica es que en la tienda haya un tendero con el que vayas coincidiendo y con el que puedas charlar un poco. Esto es muy importante para que te vaya recomendando de acuerdo con tus gustos personales, que debe conocer bien.
La última característica, no imprescindible, es que la tienda haga catas de iniciación.
Pero veamos.
El método
Te lo explico, aunque a estas alturas estoy convencido de que ya casi lo habrás podido deducir.
Se trata de que vayas a la tienda, le indiques al dependiente tus gustos y le pidas que te recomiende seis botellas. Pueden ser del presupuesto que te venga bien. En España tenemos la suerte de que hay buenos vinos para todos los bolsillos.
Una vez que estés en tu casa, con calma y preferentemente en las comidas, vas bebiendo los vinos y anotando qué es lo que te gusta o no te gusta de ese vino en concreto que tienes en la copa. Es importante que pongas un poco de atención y que lo anotes.
Cuando hayas bebido las seis botellas, vuelve a la tienda, comenta cuales te han gustado y cuales no y explica por qué. Con esos datos el tendero podrá recomendarte otras seis.
Repite este proceso cada vez que te apetezca y poco a poco te irás enamorando de este mundo. Si de vez en cuando lees algo del vino que estás bebiendo, mucho mejor. En las páginas de las bodegas suele haber suficiente información.
Cuando te apetezca haz un curso de iniciación en la tienda y poco a poco darás nuevos pasos en este mundo apasionante. Suelen durar de uno a tres días y te vendrá bien para afinar un poco.
ADVERTENCIA. Este método no funciona si te bebes las seis botellas de una sentada. Incluso aunque pongas mucha atención. Lo único que conseguirás es una resaca monumental al día siguiente.
EL GRUPO DE CATA
Cuando ya se tiene una pequeña idea, que puede ser simplemente haber hecho el cursillo de iniciación, formar un grupo de cata puede ser una buena idea.
Pero, ¿qué es esto de un grupo de cata?
Pues es bien sencillo. Un grupo de amigos que se reúnen para catar unos vinos. O sea, tratar de descubrir sus virtudes y sus defectos, poniendo después la experiencia en común.
Para empezar debe haber al menos uno con algunos conocimientos, que dirija la primera cata, que puede servir de iniciación del resto. Como la finalidad va a ser tan sólo divertirse no es necesario un profesional, aunque si hay uno, sin duda, se aprenderá mucho más.
El esfuerzo de preparar una cata
El que organiza la cata tiene que esforzarse un poco. Debe elegir un tema y seleccionar entre tres y cinco botellas que tengan que ver con él. Si tiene un tendero de confianza, apoyarse en él puede ser una gran idea.
Un ejemplo de tema podría ser vinos de Alicante, donde por cierto se están haciendo muy buenos tintos con la uva Bobal.
Se puede hacer con las botellas cubiertas, para no dejarse influir por las etiquetas o con botella descubierta. Mejor si se pone en común el tema de que se trata, para tener una idea de lo que se está bebiendo.
Para aprovechar bien la cata es bueno que el que la prepara se documente un poco sobre el tema del que va la cata. No es necesario hacer una tesis, pero algunas notas con el clima de la zona, los terrenos y principales elaboradores, incluyendo alguna anécdota, pueden hacer la cata divertida e instructiva.
Seguir la cata de una cena suele ser habitual y es bueno para la cohesión del grupo.
En mi grupo de cata solemos concertar un menú previamente con algún restaurante y hacer la cata en él, antes de la cena. Suele ser uno de los mejores momentos del mes.
El vino en un entorno de amistad
Una de las principales ventajas que le veo a este método es que el vino se bebe en un entorno que le es natural. Vino y amistad se llevan pero que muy bien.
En mi grupo de cata nos reunimos una vez al mes con cata ciega de unas cuatro botellas. Sueles ser muy divertida y una cura de humildad para los más expertos, que todo hay que decirlo.
EL LIBRO GENERALISTA
Otra forma de introducirte en el mundo del vino, conociéndolo y comenzando a apasionarte es ir leyendo un libro que trate el tema del vino de forma general.
"Vino" de André Dominé es uno de los que me ha ayudado mucho. La pena es que la edición en español está agotada y no está previsto que haya una nueva. Si el inglés no es tu problema, no es difícil de conseguir.
¿Sirve cualquier libro de vinos?
El que te indiqué antes es perfecto. De todas maneras hay muchos más libros que pueden cumplir sobradamente para iniciarte.
Los temas que debe tratar son:
- La elaboración.
- Las uvas principales.
- Los principales países productores.
- Las regiones más importantes dentro de esos países.
Con esto tendrías un bagaje suficiente y pistas para empezar a probar nuevas cosas por tu cuenta.
EL CURSO ONLINE
Una forma alternativa al libro generalista y que cuenta con la ventaja de poder tener un tutor que te vaya guiando es hacer un curso online. El problema es que, por ahora, salvo cursos para profesionales, no hay nada que sea completo.
En Estados Unidos, Natalie McLean y Elizabeth Schneider tienen cursos muy interesantes. El problema de nuevo, obviamente, es el inglés.
Bueno, el inglés y que los webinars son a altas horas de la madrugada, por el cambio horario.
Seguro que en España ya habrá alguien dándole vueltas a la idea. ¿Quieres una pista?
¿Sabes cuál es la característica común a todos los vinos de calidad?
CONCLUSIÓN
Dispones ahora de cuatro métodos probados para aficionarte de verdad al mundo del vino.
Lo bueno de estos cuatro métodos es que se pueden usar de forma simultánea. Es más, es muy recomendable practicar todos los que puedas a la vez. No tienen contraindicaciones.
De modo que ya sabes, no lo pienses mucho y ¡a practicar!