Una carretera francesa lleva a la ruina a una localidad española: "Estamos perdiendo el 90% de nuestra facturación"
"Esto podría provocar despidos y desempleo técnico", alertan desde un negocio que que sufre este escenario económico.
A veces, los daños que pueden resultar de un fenómeno meteorológico, de una catástrofe natural son indirectos y difíciles de calcular. Hasta tal punto, que puede que ni siquiera el epicentro de esa tragedia o impacto de la naturaleza haya tenido lugar en el propio punto que después adolece de sus estragos. Incluso que estos daños no sean materiales y sí económicos.
Algo similar es el escenario resultante del paso del último temporal en Francia. Concretamente, tras lo ocurrió la pasada madrugada del 6 al 7 de este mes de septiembre en el valle del Aspe. Un fuerte temporal dejó intransitable la RN134. ¿Nunca has oído hablar de ella? Probablemente sea porque no eres usuario de una importante vía de comunicación entre España y el país vecino.
El lado francés de esa carretera ha sido tan dañado por las inclemencias meteorológicas que está siendo sometido a una importante tarea de obras de reconstrucción y rehabilitación. Así lo recoge la cadena gala France3 en una información en la que apunta a que estas tareas no estarán acabadas hasta dentro de varios meses.
"Lo que me preocupa es el futuro, los próximos meses"
Además de sus propios usuarios, esta situación deja un golpe en paralelo en la localidad oscense de Canfranc, conocida por su famoso yacimiento pero también por su icónica estación de tren, un auténtico tesoro del pasado ferroviario, en la actualidad reconvertida a lujoso hotel. La falta de acceso por la carretera está privando de visitantes a esta localidad provocando pérdidas en negocios.
Principalmente, se nota la bajada de llegados desde Francia, lo que supone una caída del producto que adquieren principalmente -motivado por su bajo coste frente a su país- el alcohol y el tabaco. "Es una gran pérdida para nosotros", cuenta Javier Martín, dueño de un negocio, a la televisión francesa, adelantando que "si dura muchos meses, podría resultar complicado".
Desde una gasolinera local también confirman el daño y el temor: "Estamos perdiendo entre el 80 y el 90% de nuestra facturación. Esto podría provocar despidos y desempleo técnico". Un miedo que también comienza a recorrer su afamado hotel.
"Ya tenemos cancelaciones, de grupos para el mes de octubre, pero también de individuales", detalla el gerente de Hotel Canfranc Estación, David Muñoz, poniendo el foco en que "lo que me preocupa es el futuro, los próximos meses. ¿Aumentarán las cancelaciones? Sobre todo porque somos una locomotora económica importante a nivel local".