Trump avisa de más aranceles a "gran escala" a la UE si trata de defenderse de su declaración de guerra comercial
Los fabricantes de coches europeos avisan de que las nuevas tasan perjudican también al sector en EEUU y hasta Musk reconoce que Tesla no saldrá "indemne".

El presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró esta madrugada que está dispuesto a imponer aranceles a "gran escala" a la Unión Europea y Canadá si ambos colaboran económicamente para perjudicar a Estados Unidos, tras la última andanada conocida, ahora sobre los coches, tan sensible industria.
"Si la Unión Europea colabora con Canadá para perjudicar económicamente a EEUU, se les impondrán aranceles a gran escala, mucho mayores de lo previsto, para proteger al mejor amigo que ambos países han tenido", anunció el presidente estadounidense en un mensaje en su red social Truth.
"¡SE ACERCA EL DÍA DE LA LIBERACIÓN DE ESTADOS UNIDOS! DURANTE AÑOS NOS HAN ESTAFADO PRÁCTICAMENTE TODOS LOS PAÍSES DEL MUNDO, AMIGOS Y ENEMIGOS. PERO ESOS DÍAS TERMINARON. ¡¡¡AMERICA PRIMERO!!!", agregó el mandatario republicano en otro mensaje. Las mayúsculas, como de costumbre, son suyas.
Las advertencias de Donald Trump se producen apenas horas después de que anunciara que a partir del 2 de abril aplicarán un arancel del 25 % para todos los automóviles que sean exportados a su país, en una nueva y agresiva medida que recrudece la guerra comercial iniciada por su administración.
Estas medidas no afectarán, sin embargo, de forma temporal, a las partes de automóviles fabricadas en México y Canadá, según el decreto presidencial.
Pero establece que a los automóviles fabricados en estos dos países se les aplicarán aranceles al contenido hecho fuera de Estados Unidos, lo que supondría un gravamen parcial a esos vehículos.
Al firmar el documento en el Despacho Oval, Trump aseguró que los aranceles le pueden reportar a EEUU entre 600.000 millones y el billón de dólares en los próximos dos años y se mostró especialmente crítico con los fabricantes europeos.
"Compramos millones y millones de sus autos, de BMW, de Volkswagen, de Mercedes-Benz y ellos tienen aranceles no monetarios que hacen que sea casi imposible que podamos vender un coche en Europa", declaró. "La Unión Europea nos trata de forma horrible en comercio", insistió.

El sector avisa
La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) dijo este jueves que está "profundamente" preocupada por el anuncio de Trump y advirtió de que perjudicarán simultáneamente a los fabricantes de automóviles globales y a la industria manufacturera estadounidense. La ACEA instó por ello al republicano a considerar el impacto negativo de los aranceles del 25 % a partir del 2 de abril, no solo en los fabricantes de automóviles globales, sino también en la industria manufacturera estadounidense.
"Los fabricantes de automóviles europeos llevan décadas invirtiendo en EEUU, creando empleo, impulsando el crecimiento económico en las comunidades locales y generando cuantiosos ingresos fiscales para el Gobierno estadounidense", declaró la directora general de ACEA, Sigrid de Vries.
Los aranceles no solo afectarán a las importaciones a EEUU, una penalización que probablemente pagarán los consumidores estadounidenses, sino que las medidas sobre las piezas de automóviles también perjudicarán a los fabricantes que producen automóviles en EE.UU. para los mercados de exportación, señaló ACEA.
Y añadió que los fabricantes europeos exportan entre el 50 % y el 60 % de los vehículos que fabrican en EE.UU., lo que supone una contribución positiva sustancial a la balanza comercial estadounidense.
Para los fabricantes de automóviles europeos, la UE y EEUU deben dialogar para encontrar una solución "inmediata" que evite los aranceles y las consecuencias perjudiciales de una guerra comercial.
El anuncio, hecho la víspera por Trump al firmar la correspondiente orden ejecutiva, llega en un momento decisivo para la transformación de la industria europea y en un contexto de creciente competencia internacional, señaló también la ACEA, que representa a los 16 principales fabricantes europeos de automóviles, furgonetas, camiones y autobuses de la UE.
En el mismo sentido, se expresó anoche la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien lamentó "profundamente" la decisión de Trump y aseguró que la EU seguirá buscando "soluciones negociadas" al tiempo que protege sus intereses económicos.
Alemania, especialmente destacado en la producción de coches, ha dicho por boca del ministro saliente de Economía y Clima, Robert Habeck, que es importante que la Unión responda con firmeza. "Ahora se trata de que la UE dé una respuesta firme a los aranceles: debe quedar claro que no retrocederemos ante Estados Unidos. Fuerza y autoconfianza son necesarias. Al mismo tiempo, apoyaremos a la Comisión Europea en seguir encontrando en negociaciones una solución con Estados Unidos que evite una espiral arancelaria. Los aranceles perjudican en última instancia a Estados Unidos y a la UE y al comercio mundial en su conjunto", señaló en un comunicado.
Agregó que "los anuncios de aranceles elevados sobre automóviles y componentes de coches son malas noticias para los fabricantes alemanes de vehículos, para la economía alemana, para la UE, pero también para EEUU", finaliza.
Desde que retornó a la Casa Blanca el 20 de enero, Trump ha apostado por implementar de manera agresiva aranceles a las importaciones procedentes de diversos socios de EEUU y corregir lo que considera déficits comerciales injustos para Washington.
Musk confiesa
El multimillonario Elon Musk reconoció además que una de sus empresas, la automovilística Tesla, no saldrá indemne de la política arancelaria que está aplicando el Gobierno de EEUU. "Es importante señalar que Tesla no ha salido indemne de este problema. El impacto de los aranceles sobre Tesla sigue siendo significativo", dijo Musk en un escueto mensaje en la red X, de la que también es propietario.
Estas medidas podría afectar a la compañía de Musk si el resto de países afectados aplican las mismas tarifas a los productos estadounidenses.
Tesla, que hasta el pasado año era el mayor vendedor mundial de coches eléctricos puros, fue destronada de este puesto por la china BYD en el último trimestre del año pasado.
La compañía china la superó primero como fabricante de automóviles eléctricos en 2022, aunque en aquel caso la medición incluía también híbridos enchufables, una tipología que la compañía dirigida por Elon Musk no fabrica.